Dorothy Malone

DUELO (El último atardecer)

Combate entre dos personas que se han desafiado o retado previamente. (google.com)

“Si fueran a reproducirse en los papeles públicos, los ‘elogios’ que durante la ausencia se hacen los amigos íntimos, habría duelos a muerte todos los días”
Ignacio Manuel Altamirano (1834-1893) Escritor, periodista, maestro y político mexicano

EL ÚLTIMO ATARDECER (The last sunset) – 1961

last

Director Robert Aldrich
Guion Dalton Trumbo
Fotografía Ernest Laszlo
Música Ernest Gold
Producción Universal/Brynaprod
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 112m. Color
Reparto Rock Hudson, Kirk Douglas, Dorothy Malone, Carol Lynley, Joseph Cotten, Regis Toomey, Neville Brand, Jack Elam.
* Kirk Douglas – Pretty little girl in the yellow dress

«Creo que las mujeres sobrevivimos a los hombres. Ellos, o matan o mueren. Pero nosotras les enterramos, les sobrevivimos…»

Sin descuidar los revestimientos de cinismo, violencia y amargura que siempre definieron su cine, Robert Aldrich destapó un inusitado romanticismo elegíaco e introspectivo al cuajar este western de halo trágico, vertiente psicológica e incipiente tono crepuscular, inspirado en la novela Sundown at crazy horse de Howard Rigsby. Las cuentas pendientes entre un sheriff vengativo e implacable y un forajido errante, agresivo y bravucón, junto a la atracción que profesan por la esposa y la hija del hombre que los contrató para conducir un rebaño de reses desde México a Texas, componen el doble asunto neurálgico sobre el que pivota este entramado de pasiones humanas de naturaleza telúrica y melodramatismo sirkiano, rematado con un duelo final tan melancólico como sublimemente planificado. Elaborados diálogos e inspiradas interpretaciones de un reparto encabezado por Kirk Douglas, a la sazón productor del film, que quiso poner a prueba sus discutibles dotes como cantante con un tema de Dimitri Tiomkin y el célebre huapango Cucurrucucú paloma de Tomás Méndez.

Otros westerns habitualmente evocados por su DUELO final

Raíces profundas – George Stevens (1953)
Duelo en la alta sierra – Sam Peckinpah (1962)
Hasta que llegó su hora – Sergio Leone (1968)

EMBROLLO (El sueño eterno)

Situación o asunto confuso, desordenado, problemático o difícil de resolver. (google.com)

«Echamos a caminas tras la banda y en ese instante me hubiera gustado decirles a mis hijos que esa mujer era su tercera abuela, pero reservé para mí el embrollo genealógico» (novela Tierra de campos)
David Trueba (1969-) Escritor, periodista, director de cine, guionista y actor español

EL SUEÑO ETERNO (The big sleep) – 1946

Director Howard Hawks
Guion William Faulkner, Leigh Brackett y Jules Furthman
Fotografía Sid Hickox
Música Max Steiner
Producción Warner Bros.
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 114m. B/N
Reparto Humphrey Bogart, Lauren Bacall, John Ridgely, Martha Vickers, Dorothy Malone, Regis Toomey, Elisha Cook Jr., Peggy Knudsen.

«Caramba, caramba. Tantas armas en la ciudad y tan pocos cerebros. ¿Sabe? Es usted el segundo tipo que veo hoy convencido de que con una pistola en la mano es el dueño del mundo»

El designio de perpetuar la electrizante química que irradió la pareja formada por Humphrey Bogart y la jovencísima Lauren Bacall en su anterior película, TENER Y NO TENER (1944), impulsó a Howard Hawks a dirigir con su proverbial elegancia descriptiva esta adaptación de la novela homónima en la que Raymond Chandler presentaba por primera vez al personaje de Philip Marlowe, a partir de entonces prototipo por antonomasia del detective privado sagaz, cínico y desencantado. Erigida en una de las obras cumbres del cine negro, supedita su incuestionable notoriedad en una urdimbre argumental absolutamente enrevesada, dispuesta a desbaratar sin compasión la lógica y el sentido común de los acontecimientos hasta conformar un embrollo dramático inasequible, un enjambre de subtramas corruptas y criminales deleitoso, sensual y absorbente, colmado de diálogos irrepetibles por su mordacidad y doble sentido. La Warner no consiguió hacerse con los servicios del escritor del relato, por entonces en nómina con la Paramount, razón que probablemente influyó en la decisión de los guionistas de cambiar el final de la historia.

Otras películas construidas a partir de un EMBROLLO argumental

Un marido rico – Preston Sturges (1942)
Matrix – Lilly y Lana Wachowski (1999)
Origen – Christopher Nolan (2010)

PILOTO (Ángeles sin brillo)

Persona que dirige una nave, un aparato aeronáutico o un vehículo de carreras. (RAE)
Un piloto acrobático es aquella persona que pilota aviones acrobáticos, realizando maniobras de acrobacia aérea en una exhibición de vuelo, festivales aéreos o competiciones acrobáticas. (Wikipedia)

«Conozco a un hombre del gobierno. Estaba tan ciego como la luna. Vio el sol en la noche, tomó un piloto top-gun y lo hizo volar por un agujero hasta que se hizo realmente viejo. Y nunca bajó, solo voló hasta que estalló» (canción Time will crawl)
David Bowie (1947-2016) Músico y compositor británico

ÁNGELES SIN BRILLO (The tamished angels) – 1957

Director Douglas Sirk
Guion George Zuckeman
Fotografía Irving Glassberg
Música Frank Skinner
Producción Universal
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 91m. B/N
Reparto Rock Hudson, Dorothy Malone, Robert Stack, Jack Carson, Robert Middleton, Troy Donahue, Alan Reed.

«Necesito un avión como un alcohólico necesita beber. ¿Quieres que te suplique? Lo haré»

Aferrándose al universo literario de William Faulkner (Pylon) para reemplazar su deslumbrante y pigmentada estilización por una atmósfera turbia, sórdida y perversamente desalentadora, Douglas Sirk trazó una de sus más seductoras y extravagantes representaciones melodramáticas, que, al igual que el resto de sus obras, padeció un injusto arrinconamiento por parte de la crítica norteamericana del momento. Las angustiosas y descorazonadoras peripecias sentimentales que circundan a un grupo de pilotos de acrobacias aéreas, enmarcadas en los años de la Gran Depresión, resultaron idóneas para desarrollar uno de los temas más recurrentes del director: el vituperable mercantilismo de la sociedad yanqui, en esta ocasión captado con una exquisita miscelánea de excitación, perspicacia y profundidad psicológica. El trío protagonista, que ya había coincidido un año antes a las órdenes del realizador alemán en la sublime ESCRITO SOBRE EL VIENTO, exteriorizaba con inspiración la naturaleza de unos seres adheridos al infortunio e irremisiblemente condenados al fracaso.

Otras películas sobre PILOTOS ACROBÁTICOS

Diablos del aire – Lloyd Bacon (1935)
El carnaval de las águilas – George Roy Hill (1975)
El desafío del cóndor – Barry Brown (1980)

FASCINACIÓN (La casa número 322)

Sensación o estado en el que una persona está completamente asombrada, admirada e interesada por un fenómeno, otra persona o un detalle. La fascinación puede muchas veces confundirse o convertirse en un acto de obsesión si aquella admiración y atracción que uno siente hacia otro o hacia una cosa se vuelve constante e irracional. (definicionabc.com)

“La fascinación va un paso más allá del interés. El interesado quiere saber si algo funciona o no. El fascinado quiere aprender cómo es que funciona. Aprenda a convertir la frustración en fascinación. Aprenderá más fascinándose con la vida que frustrándose con ella”
Jim Rohn (1930-2009) Empresario estadounidense, autor y orador motivacional

LA CASA NÚMERO 322 (Pushover) – 1954

Director Richard Quine
Guión Roy Huggins
Fotografía Lester B. White
Música Arthur Norton
Producción Columbia
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 91m. B/N
Reparto Fred MacMurray, Kim Novak, Phil Carey, Dorothy Malone, E.G. Marshall, Allen Nourse, Phil Chambers, Alan Dexter.

«El dinero no es sucio, sólo la gente»

Primer largometraje importante de Richard Quine, basado en los relatos The night watch de Thomas Walsh y Rafferty de William S. Ballinger, que supuso su única incursión en el cine negro y marcó el inicio de su enigmática y arrebatadora relación profesional como Kim Novak, prolongada en otras tres apreciables películas durante las cuales la admiró y veneró con auténtico fervor. La amarga historia de fascinación, deseo y envilecimiento entre la amante del presunto atracador a una sucursal bancaria y el ambicioso inspector de policía encargado de vigilarla rescataba la más pura tradición del género para conferirle, con gran sobriedad narrativa y una encomiable resolución visual, un aspecto más audaz, conciso, terso y tajante. Insuperable pareja protagonista, donde Fred MacMurray retomaba un papel similar al encarnado en la wilderiana PERDICIÓN (1944) y la entonces tentadora y enigmática «starlet» de la Columbia se dejaba acariciar con la cámara con una deliberada pero encantadora inocencia. Cabe destacar la fotografía de Lester White en su hábil empleo de las luces y las sombras.

Otras películas donde la FASCINACIÓN que ejerce la protagonista es comparable a la que profesa el realizador por su actriz

La carta – William Wyler (1940) / Bette Davis
Marnie, la ladrona – Alfred Hitchcock (1964) / Tippi Hedren
La última película – Peter Bogdanovich (1971) / Cybill Shepherd

MELODRAMA (Escrito sobre el viento)

El término melodrama, similar al drama pero con varios personajes, tiene el significado literal de obra teatral dramática en la que se resaltan los pasajes sentimentales mediante la incorporación de música instrumental. Con cualquier tipo de obra teatral, cinematográfica o literaria cuyos aspectos sentimentales, patéticos o lacrimógenos estén exagerados con la intención de provocar emociones en el público (…) En el cine, abarca películas que tienen una carga emocional o moral muy fuerte o emotiva, atendiendo al gusto de cada persona. Son películas dramáticas que buscan ser lo más realistas posibles dando un significado y connotación humana. (Wikipedia)

“Si usted cree, como los griegos, que el hombre está a merced de los dioses, debe escribir tragedias. El fin es inevitable desde el principio. Pero si cree que el hombre puede resolver sus propios problemas y que no está a merced de nadie, entonces probablemente escriba melodramas”
Lillian Hellman (1905-1984) Dramaturga estadounidense

ESCRITO EN EL VIENTO (Written on the wind) – 1956

escrito

Director Douglas Sirk
Guion George Zuckerman
Fotografía Russell Metty
Música Frank Skinner
Producción Universal
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 99m. Color
Reparto Rock Hudson, Lauren Bacall, Robert Stack, Dorothy Malone, Robert J. Wilke, Robert Keith, Grant Williams, Edward Platt, John Larch.

«A la belleza, a la verdad, que es todo menos bella»

Condensada y embriagadora adaptación de una novela original de Robert Wilder que representa la quintaesencia del melodrama hollywoodiense de los cincuenta por el grumo de intensidad, paroxismo y desesperanza con el que se abordó su desaforado argumento y el rabiosamente tornasolado tratamiento visual que Douglas Sirk y el operador Russell Metty supieron infundir a su estilizada puesta en escena. La decadente crónica familiar de unos magnates petrolíferos de Texas enfrentados por sus turbulentas e ilícitas pasiones fue visceralmente subvertida en un absorbente catálogo de odios, celos e insatisfacciones amorosas sumergidas en alcohol para plantear el fatídico desmoronamiento de la sociedad pudiente norteamericana y corroborar, una vez más, la tortuosa y aciaga concomitancia entre el poder material y el sexo. Magnífica dirección de actores, encabezados por el actor fetiche del realizador (Rock Hudson) y entre los que sobresale la explosiva Dorothy Malone (que protagonizaba uno de los bailes más sensuales, morbosos y deletéreos jamás vistos en una pantalla) para un film icónico que se erigiría en semillero de futuras sagas televisivas: DALLAS, DINASTÍA, etc.

Otras obras maestras del MELODRAMA cinematográfico

Lo que el viento se llevó – Victor Fleming (1939)
Tú y yo – Leo McCarey (1957)
Esplendor en la hierba – Elia Kazan (1961)