Gregory Peck

ACUSACIÓN (El proceso Paradine)

Cargo que se formula ante autoridad competente contra una o varias personas determinadas, por considerarlas responsables de un delito o falta, con el objetivo de que se le aplique la sanción prevista. Esta persona recibe el nombre de acusado. (Wikipedia)

“Casi siempre. a las acciones de los malvados las persigue primeramente la sospecha, luego el rumor y la voz pública, la acusación después y, finalmente, la justicia”
Marco Tulio Cicerón (106 a.C. – 43 a.C.) Político, filósofo, escritor y orador romano

EL PROCESO PARADINE (The Paradine case) – 1947

paradine

Director Alfred Hitchcock
Guion David O. Selznick y Alma Reville.
Fotografía Lee Garmes
Música Franz Waxman
Producción ABC/David O. Selznick
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 125m. B/N
Reparto Gregory Peck, Ann Todd, Alida Valli, Charles Laughton, Charles Coburn, Ethel Barrymore, Louis Jourdan, Leo G. Carroll.

«Los mejores hombres siempre acaban con las peores mujeres»

La inevitable pugna entre la obsesiva meticulosidad de Hitchcock y el intrusivo autoritarismo megalomaníaco de David O. Selznick, contenida en sus tres brillantes colaboraciones previas, estalló por fin con este subestimado melodrama judicial, basado en una novela homónima de Robert S. Hichens. La imposición del productor de ciertos actores (Gregory Peck, entre ellos), su implicación en el guion o sus constantes interferencias en el rodaje no consiguieron aplacar la perversa inventiva y la pasión por el detalle ostentadas por el realizador británico para elucidar el paulatino proceso de degradación personal y profesional que sufre un prestigioso, honesto y felizmente casado jurista londinense tras aceptar la defensa de una misteriosa y altiva dama de la alta sociedad, acusada de haber envenenado a su invidente esposo. La clásica dicotomía entre razón y pasión dominaba una intriga de opresiva escenografía, enfermizo sentido de la moral y poderosa capacidad expresiva, especialmente palpable en la destreza de sus encuadres y en unos movimientos de cámara tan estilosos como innovadores.

Otras películas que describen la defensa de una ACUSACIÓN de asesinato

Testigo de cargo – Billy Wilder (1957)
El sargento negro – John Ford (1960)
Matar un ruiseñor – Robert Mulligan (1962)43

AYUDA (La noche de los gigantes)

Acción que una persona hace de manera desinteresada para otra por aliviarle el trabajo, para que consiga un determinado fin, para paliar o evitar una situación de aprieto o riesgo que le pueda afectar, etc. (google.com)

“El que hace sufrir al prójimo se perjudica a sí mismo. El que ayuda a los demás, se ayuda a sí mismo”
León Tolstói (1828-1910) Novelista ruso

LA NOCHE DE LOS GIGANTES (The stalking moon) – 1968

stalking

Director Robert Mulligan
Guion Alvin Sargent
Fotografía Charles Lang Jr.
Música Fred Karlin
Producción Pakula-Mulligan Production/National General Pictures
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 109m. Color
Reparto Gregory Peck, Eva Marie Saint, Robert Forster, Noland Clay, Russell Thorson, Frank Silvera, Lonny Chapman, Lou Frizzell.

«Tengo un rancho en Nuevo México. Lo compré por correo, solo lo he visto una vez. Durante ocho años he ido enviando dinero a un viejo amigo que vive allí para que me comprara ganado. No es una gran cosa, pero es un lugar donde vivir (…) He vivido solo durante toda mi vida, pero será usted bien recibida si se decide a acompañarme.»

Una mujer blanca y su hijo mestizo reciben la ayuda de un curtido explorador del ejército de caballería recién retirado para salir del territorio de Arizona soslayando la inquietante amenaza del padre de la criatura, un jefe apache de irracional instinto asesino apodado Salvaje. La sólida, estrecha y fructífera colaboración de Robert Mulligan con el productor Alan J. Pakula expiró con este claustrofóbico western de trazo psicológico, atmósfera malsana e inusitadas connotaciones terroríficas, revelado en unos parajes exteriores tan soleados como hostiles, opresivos y angustiosos. Basada en una novela homónima de Theodore V. Olsen, ponderaba la asunción del auxilio en aras de la libertad a través de una puesta en escena de carácter intimista e introspectivo, donde la sintetizada concisión de sus diálogos cedía paso a la retórica del gesto y la mirada para transmitir el conflicto interno que afecta a sus personajes. Extraordinaria banda sonora de Fred Karlin, meritorio trabajo de fotografía a cargo de Charles Lang y convincente protagonismo de un Gregory Peck ya maduro, pero aún en buena forma.

Otras películas que testimonian un compromiso de AYUDA

El jinete pálido – Clint Eastwood (1985)
Hijos de los hombres – Alfonso Cuarón (2006)
El Havre – Aki Kaurismäki (2011)

BIGOTE (El pistolero)

Pelo que crece en la región de la cara comprendida entre el límite inferior de la nariz y el labio superior. Los pelos verdaderamente son conspicuos en los hombres adultos, como también lo suele ser la barba (…) En algunos casos sirve para cubrir defectos en la piel o cicatrices, o utilizarse simplemente como adorno o según la moda. Suele ser necesario cuidarlo y recortarlo regularmente. (Wikipedia)

«Bajo el bigote gris, labios de hastío, y una triste expresión que no es tristeza, sino algo más y menos, el vacío del mundo en la oquedad de su cabeza» (canción Del pasado efímero)
Joan Manuel Serrat (1943-) Cantautor, compositor, actor, escritor, poeta y músico español

EL PISTOLERO (The gunfighter) – 1950

pistolero

Director Henry King
Guion William Bowers y William Sellers
Fotografía Arthur C. Miller
Música Alfred Newman
Producción 20th Century Fox
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 84m. B/N
Reparto Gregory Peck, Helen Westcott, Millard Mitchell, Jean Parker, Karl Malden, Mae Marsh, Richard Jaeckel, Skip Homeier.

«En realidad, no vives… Sin alegría alguna, no tienes donde ir, solo evitar que puedan asesinarte (…) Esperando caer en manos de otro bravucón que sea como uno era»

En uno de los largometrajes más redondos de su filmografía, el versatil Henry King aunaba la intensidad dialéctica traslucida en JOHNNY GUITAR u otros ‘western de interiores’ con las claustrofóbicas coordenadas espacio-temporales propias de denominado ‘western psicológico’, subgénero efímero que tuvo en SOLO ANTE EL PELIGRO a su más prestigioso espécimen y del que este film se erige en uno de sus más dignos precursores. A partir de un argumento ideado por el también realizador André De Toth, describía la llamativa arribada a la pequeña localidad de Cayenne de un legendario pistolero, que, en un decidido propósito de redención, pretende recuperar el amor de su esposa y de su hijo en común para emprender una nueva vida familiar, lejos de una reputación que lo convierte en ansiado blanco de todo tipo de matones. Ejemplar interpretación de Gregory Peck como obvio trasunto del mítico forajido Johnny Ringo (de ahí su singular bigote) para una película de voluntad realista e idiosincrasia desmitificadora, que sobresale por la circunspecta modulación de su urdimbre dramática.

Otras películas cuyo protagonista sucumbió de forma puntual a la estética del BIGOTE

Viva Zapata – Elia Kazan (1952) / Marlon Brando
Easy rider (Buscando mi destino) – Dennis Hopper (1969) / Dennis Hopper
Sérpico – Sidney Lumet (1973) / Al Pacino

MAR (El mundo en sus manos)

Masa de agua salada que cubre la mayor parte de la superficie terrestre. (RAE)
Alta mar Zona del mar alejada de las costas. En particular, zona del mar sobre la que ningún Estado tiene soberanía, y sujeta a normas específicas de derecho. (wiktionary.org)

«Enfrentaba a los salvajes en playas tropicales, aplastaba motines en alta mar, y en un botecito, en el océano, mantenía vivo el espíritu de hombres desesperados… ejemplo, siempre, de la dedicación al deber, y héroe tan impávido como los de los libros» (novela Lord Jim)
Joseph Conrad (1857-1924) Escritor británico de origen polaco

EL MUNDO EN SUS MANOS (The world in his arms) – 1952

mundo

Director Raoul Walsh
Guion Borden Chase
Fotografía Russell Metty
Música Frank Skinner
Producción Universal
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 104m. Color
Reparto Gregory Peck, Ann Blyth, Anthony Quinn, John McIntire, Andrea King, Sig Ruman, Carl Esmond, Eugenie Leontovich, Hans Conried.

«Este caballero no es un caballero. Es un ladrón marino que se gana la vida robando focas a los rusos. No se baña, ni se afeita, ni conoce el tacto del buen lino limpio. Cuando la luna brilla, se queda afuera toda la noche y aúlla como un perro, luego se acurruca y duerme en el suelo hasta el mediodía. ¿No es cierto, Portugués?»

En pleno apogeo del cine de aventuras marítimas surgió este esplendoroso e irresistible clásico del género, basado en la homónima y postrera novela de Rex E. Beach, que constituye una de las películas de raigambre piratesca más renombradas de todos los tiempos. La afectuosa rivalidad que nace, allá por el 1850, entre un capitán dedicado al comercio de pieles de focas y un rufián filibustero apodado ‘El Portugués’, con el exótico estímulo de una sugestiva condesa rusa de por medio, sirvió a Raoul Walsh para cumplimentar una nueva demostración de su insólito talento compositivo e incansable vitalidad narrativa, en esta ocasión pulimentada a través de una miscelánea de aliento épico, indisimulado alarde patriotero y burlesco sentido del humor. Entre las numerosas secuencias sugerentes de este cautivador elogio al mundo marino y a las múltiples tareas de navegación, beneficiado por una óptima nómina actoral y la extraordinaria fotografía en Technicolor de Russell Metty, sobresale la trepidante y antológica carrera/persecución de goletas entre San Francisco y Alaska.

Otras películas ambientadas en ALTA MAR

El navegante – Donald Crisp y Buster Keaton (1924)
Rebelión a bordo – Frank Lloyd (1935)
20000 leguas de viaje submarino – Richard Fleischer (1954)

FORTÍN (Los cañones de Navarone)

Pequeño fuerte o construcción militar para resistir ataques enemigos. (google.com)

«Nunca gana el ganador, siempre pierde el perdedor, brama en su trono el rey de bastos víctima del desamor. Eva deshoja la flor roja de su corazón y alrededor del fortín se cuece el motín de la desesperación» (canción Tiempo después)
Joaquín Sabina (1949-) Cantautor, poeta y pintor español

LOS CAÑONES DE NAVARONE (The guns of Navarone) – 1961

navarone

Director J. Lee Thompson
Guion Carl Foreman
Fotografía Oswald Morris
Música Dimitri Tiomkin
Producción Highroad Productions/Columbia
Nacionalidad Reino Unido/ Estados Unidos
Duración 150m. Color
Reparto Gregory Peck, David Niven, Anthony Quinn, Stanley Baker, Anthony Quayle, Irene Papas, James Darren, James Robertson Justice.

«Todo puede ocurrir en la guerra. En medio de la locura total, la gente revela los más extraordinarios recursos: ingenio, valor, sacrificio…»

Paradigmático ejemplar del cine de acción y aventuras bélicas producido a lo largo de los años sesenta, basado en la novela homónima de Alistair McLean, que enfatizaba con una impecable graduación de la intriga la misión casi suicida que un escuadrón aliado de élite acomete en la isla del título para devastar el inexpugnable fortín artillado alemán que obstruye la navegación por el mar Egeo, en plena Segunda Guerra Mundial. Reemplazando a última hora a Alexander Mackendrick, despedido por el productor Carl Foreman a causa de insalvables desavenencias creativas, el eficaz artesano J. Lee Thompson asumió la responsabilidad de encauzar este apoteósico ensalzamiento al coraje marcial, encomiado por un explosivo despliegue de efectos especiales, un espectacular reparto internacional y una lograda banda sonora a cargo de Dimitri Tiomkin, inspirada en melodías tradicionales griegas, que realzaba la percepción de epopeya y heroicidad que transmiten sus imágenes. En 1978, Guy Hamilton dirigiría una aceptable secuela bajo el título FUERZA 10 DE NAVARONE.

Otras películas determinadas por la presencia de un FORTÍN

Pampa bárbara – Lucas Demare y Hugo Fregonese (1945)
Zulú – Cy Enfield (1964)
El destierro – Arturo Ruiz (2015)