William Wyler

CUAQUERISMO (La gran prueba)

Doctrina religiosa cristiana protestante que tuvo su origen en las ideas del religioso británico George Fox (1624-1690). Se caracteriza por creer que la revelación divina es inmediata e individual y que todas las personas pueden sentir la palabra de Dios en sus almas. Carece de un credo formal, de culto y de jerarquía eclesiástica. (google.com)

«A los cuáqueros los metían en prisión por ser honrados. Ellos generaron la banca ética, liberaban a los esclavos en Estados Unidos y en Inglaterra se negaban a quitarse el sombrero ante el rey, porque todos somos iguales ante Dios.»
Rosa Serra (1956-) Profesora, historiadora y escritora española

LA GRAN PRUEBA (Friendly persuasion) – 1956

friendly

Director William Wyler
Guion Michael Wilson
Fotografía Ellsworth Fredericks
Música Dimitri Tiomkin
Producción Allied Artists
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 131m. Color
Reparto Gary Cooper, Dorothy McGuire, Marjorie Main, Anthony Hopkins, Richard Eyer, Robert Middleton, Phyllis Love.

«Yo solo soy su padre, Elisa, no su conciencia. La vida de un hombre no vale nada si no vive de acuerdo con su conciencia»

La sobriedad, elegancia y pureza de estilo acompañó siempre la trayectoria como realizador de William Wyler, incluso en sus películas menos reconocidas como este western costumbrista de trazo amable, basado en la novela The friendly persuasion de Jessamyn West. Ambientada en el sur de Indiana, en plena Guerra de Secesión (1862), planteaba con honrosa fluidez descriptiva el dilema moral que se cierne sobre una simpática familia de granjeros cuáqueros, al verse empujados a transgredir sus profundas convicciones pacifistas ante la amenazante llegada del ejército confederado. Sazonada con finas porciones de comedia familiar e intimista, algunas hermosas y románticas (la escena del granero) y otras decididamente jocosas (las intervenciones del ganso Samantha), propone un condescendiente alegato a favor de la libertad de conciencia, distinguido por un preciso guion del ‘blacklisted’ Michael Wilson, el absoluto dominio del oficio narrativo de su realizador y un convincente conjunto de interpretaciones, entre las que sobresalen unos impecables Gary Cooper y Dorothy McGuire.

Otras películas con presencia del CUAQUERISMO

Penn of Pennsylvania – Lance Comfort (1942)
La profundidad del mar – Rudolph Maté (1958)
Vientos de otoño – Charles B. Pierce (1976)

DESIGUALDAD (Calle sin salida)

Condición o circunstancia de no tener una misma naturaleza, cantidad, calidad, valor o forma que otro, o de diferenciarse de él en uno o más aspectos. (google.com)
Se entiende por desigualdad social a una situación de disparidad o desventaja de alguna porción de la ciudadanía de un país, o entre países de una región, o entre regiones del mundo, respecto a otras que se ven favorecidas injustamente. (concepto.de)

“No tiene sentido decir que los hombres son iguales ante la ley, cuando es la ley mantenedora de su desigualdad”
Ramiro de Maeztu (1875-1936) Diplomático y escritor español

CALLE SIN SALIDA (Dead end) – 1937

dead

Director William Wyler
Guion Lillian Hellman
Fotografía Gregg Toland
Música Alfred Newman
Producción United Artists
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 93m. B/N
Reparto Sylvia Sidney, Joel McCrea, Huphrey Bogart, Marjorie Main, Claire Trevor, Ward Bond, Wendy Barrie, Allen Jenkins, Billy Halop.

«Puede ser que esté equivocado. Todos cometemos errores, jefe. Por eso ponen la goma en los extremos de los lápices»

Una de las obras más insólitas surgidas de la fructífera asociación entre William Wyler y el productor Samuel Goldwyn la encontramos en esta notable combinación de drama social y cine negro, basada en la homónima pieza teatral realista de Sidney Kingsley, que, con el tenue trasfondo de una sensible historia de amor, presentaba la vida cotidiana en un conflictivo suburbio neoyorquino (impecablemente recreado en estudio) para incidir en la desigualdad económica y el paro como principales causas de la delincuencia. Sin poder evitar la procedencia escénica del relato, la película fundamentó su valor artístico en la habitual destreza descriptiva de su infravalorado realizador, así como en sus elevadas dotes en la dirección de actores, comandados por un Humphrey Bogart en plena ascensión al estrellato. Entre el reparto, cabía destacar la incorporación a la gran pantalla de los ‘Dead End Kids’, un grupo juvenil procedente del East Side que ya había protagonizado la versión teatral en Broadway, y, que a partir de entonces, gozaría de cierta fama llegando a intervenir en otros seis largometrajes, entre ellos el insigne clásico ÁNGELES CON CARAS SUCIAS.

Otras películas determinadas por el estigma de la DESIGUALDAD SOCIAL

Cadenas rotas – David Lean (1946)
Macario – Roberto Gavaldón (1960)
Parásitos – Bong Joon-ho (2019)

VESTIDO (Jezabel)

El vestido puede servir para designar un traje de mujer.​ Si nos atenemos a una definición más estricta, un vestido se compone concretamente de una falda y cuerpo en una misma pieza y tela. Hasta los años 60 del siglo XX será considerado como un elemento clásico de la moda femenina, siendo desde entonces un elemento menos frecuente en su uso, relegado en ocasiones a celebraciones especiales. Los vestidos pueden ser para distintas ocasiones y depende de estas ocasiones el tipo, material, forma y color que tenga dicho vestido. (Wikipedia)

“Entiendo que te gusten los vestidos largos. Tapan muchos defectos”
Mae West (1893-1980) Actriz estadounidense

JEZABEL (Jezebel) – 1938

Director William Wyler
Guion Abem Finkel, Clements Ripley y John Huston
Fotografía Ernest Haller
Música Max Steiner
Producción Warner Bros.
Nacionalidad Dinamarca/ Suecia
Duración 103m. B/N
Reparto Bette Davis, Henry Fonda, George Brent, Margaret Lindsay, Donald Crisp, Fay Bainter, Richard Cromwell, Spring Byington.

«¿Estás seguro de que es el vestido? No puede ser que tengas miedo, miedo de que alguien me insulte y te resulte necesario defenderme»

Espléndido melodrama sureño, basado en la famosa obra teatral homónima de Owen Davis, que constituye la primera de las tres insignes películas que brotaron de la relación profesional y afectiva entre William Wyler y Bette Davis. Ambientado en la Nueva Orleans de 1852, narraba la historia de una muchacha posesiva, consentida e irresponsable, de instinto manipulador y un orgullo ilimitado, que actúa al margen de las férreas y arcaicas tradiciones sudistas sin temer al escándalo, como demuestra al presentarse en un baile de sociedad con un vestido rojo como acto de humillación contra su amado. Una obra intensa, febril y arrebatadora, resuelta con la habitual soltura descriptiva de su ilustre realizador y potenciada por la competencia de un excepcional equipo técnico y actoral, abanderado por la temperamental «Reina de Hollywood», que, si bien sirvió para consolidarla como rutilante estrella, no le otorgó el suficiente grado de aquiescencia para poder interpretar a Scarlett O’Hara en LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ, aunque una previa votación radiofónica la investía como favorita del público para hacerse con tan análogo papel.

Otras películas recordadas, entre otras cosas, por un VESTIDO

Gilda – Charles Walters (1946)
La tentación vive arriba – Billy Wilder (1955)
Desayuno con diamantes – Blake Edwards (1961)

CAZAFORTUNAS (La heredera)

Persona que intenta hacer un matrimonio de conveniencia con una persona rica. (google.com)

«Su conversación sería ágil e ingeniosa. Su sonrisa derretería el corazón del caballero cazafortunas. Él estaría tan prendado de ella que ya no le importaría la cuantiosa dote de la joven y se enamoraría perdidamente por primera vez en su vida, hasta entonces cínica y disoluta» (novela El profesor de francés)
Laura Kinsale (1950-) Escritora estadounidense

LA HEREDERA (The heiress) – 1949

Director WilliaM Wyler
Guion Ruth Goetz y Augustus Goetz
Fotografía Leo Tover
Música Aaron Copland
Producción Universal
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 115m. B/N
Reparto Olivia de Havilland, Montgomery Clift, Ralph Richardson, Miriam Hopkins, Vanessa Brown, Mona Freeman, Ray Collins, Paul Lees.

«Catherine, llevo meses intentando no ser cruel contigo, pero ya es hora de que comprendas la verdad. ¿Cuántas chicas se hubieran enamorado de él en la ciudad? (…) Hay cien mujeres mucho más guapas, mil mujeres más inteligentes, pero tú tienes una virtud que las supera a todas (…) ¡Tu dinero!»

Contundente adaptación de la exitosa versión teatral que Ruth y Augustus Goetz concibieron a partir de la novela corta Washington Square de Henry James, a su vez inspirada en un hecho real, que constituye uno de los grandes clásicos del melodrama de finales de los años cuarenta. La conocida historia de desengaños e imposturas entre el atractivo cazafortunas y la solterona neoyorquina de maltrecha autoestima, heredera de un acaudalado doctor viudo que se opone tajantemente a la relación, deparaba una crónica costumbrista tan distinguida como apasionada y lacerante, dispuesta a explorar los prejuicios sociales y las confrontaciones de clase del puritano conservadurismo decimonónico para reflexionar sobre la insatisfacción vital y el irreemplazable anhelo de felicidad. Modélico diseño de producción, evocadora partitura de Aaron Copland, sublime vestuario de Edith Head y diamantina dirección de actores (con una maravillosa Olivia de Havilland) para una película imprescindible, objeto de un correcto aunque innecesario remake a cargo de Agnieszka Holland en 1997.

Otras películas protagonizadas por un/a CAZAFORTUNAS

Al filo de las nueve – Richard Whorf (1947)
Los caballeros las prefieren rubias – Howard Hawks (1953)
Crueldad intolerable – Joel Coen (2003)

CRISIS (Desengaño)

1. Cambio importante en el desarrollo de un proceso que da lugar a una inestabilidad.
2. Problema, conflicto, situación delicada.
(Espasa-Calpe)
Las relaciones personales y los vínculos afectivos van evolucionando con el tiempo. Muchas veces esto supone llegar a un mayor grado de compenetración e intimidad, pero en otras el paso de los años no hace más que acentuar la intensidad de los conflictos enquistados. La crisis matrimonial es la consecuencia de muchos de estos procesos: un punto en la que la relación se queda estancada y uno o ambos miembros de la pareja sienten que el matrimonio ha perdido su razón de ser. (psicologiaymente.com)

“Sin crisis no hay desafíos, sin desafíos la vida es una rutina, una lenta agonía. Sin crisis no hay méritos”
Albert Einstein (1879-1955) Físico alemán

DESENGAÑO (Dodsworth) – 1936

Director William Wyler
Guion Sidney Howard
Fotografía Rudolph Maté
Música Alfred Newman
Producción Samuel Goldwyn Company
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 96m. B/N
Reparto Walter Huston, Ruth Chatterton, Mary Astor, David Niven, Paul Lukas, John Payne, Maria Ouspenskaya, Spring Byington.

«Quiero mucho más que un viaje fuera de esto, Sam. Quiero una nueva vida, empezar desde el principio. Una vida perfectamente gloriosa, libre y aventurera, está llegando a nosotros. Hemos hecho nuestro trabajo»

Convincente adaptación de la novela homónima de Sinclair Lewis, producida por el todopoderoso Samuel Goldwyn, que figura como uno de los melodramas más rigurosos, contenidos y, curiosamente, menos valorados de su ilustre realizador. En él se escrutaba con determinación y una total carencia de sensacionalismo la crisis afectiva y el consecuente proceso de desintegración que un matrimonio norteamericano de clase alta, integrado por un potentado pero humilde industrial del automóvil y su inmadura esposa, emprende tras una experiencia acontecida durante un viaje a Europa. Wyler abordó la hipocresía social y el culto a las apariencias que subyace en las relaciones conyugales (tema tabú en el Hollywood de la época) con exquisita naturalidad y un cierto punto de ironía, sirviéndose de un guion que exploraba con franqueza y sensatez cuestiones tan espinosas como el miedo a envejecer o la estresante premura por consumir la experiencia vital del placer y el desenfado. Estupendos decorados de Richard Day e inspirados intérpretes, entre los que destacaba la fuerza y profesionalidad de Walter Huston.

Otras películas que abordan una situación de CRISIS MATRIMONIAL

El desprecio – Jean-Luc Godard (1963)
Maridos y mujeres – Woody Allen (1992)
Eyes wide shut – Stanley Kubrick (1999)