Sam Peckinpah

GENTUZA (Perros de paja)

Grupo o tipo de gente que es considerada despreciable. (RAE)

«Como de costumbre, nos enseñan al pasar sus aristocráticos ojos y los agujeros de sus narices y, como esta gentuza me repugna de corazón, a punto estaba de despedirme…» (novela Las penas del joven Werther)
Johann W. Goethe (1749-1832) Dramaturgo, novelista, poeta y alemán

PERROS DE PAJA (Straw dogs) – 1971

straw

Director Sam Peckinpah
Guion Sam Peckinpah y David Zelag Goodman
Fotografía John Coquillon
Música Jerry Fielding
Producción ABC Pictures
Nacionalidad Reino Unido
Duración 118m. Color
Reparto Dustin Hoffman, Susan George, David Warner, Peter Vaughan, T.P. Kenna, Peter Arne, Del Henney, Ken Hutchinson, Colin Welland.

«A las ratas se las acosa, se las atrapa y se las encierra.»

En su primer distanciamiento del western, Sam Peckinpah coronó su rebelde, visceral y controvertida propensión a calibrar el instinto animal que anida en la naturaleza humana transformando la novela The siege of Trencher’s farm de Gordon M. Williams en un modélico estudio sobre la gestación de la violencia y su relación directa con conceptos como la masculinidad, el poder, la dominación o la sexualidad. A través de una puesta en escena tan malsana como claustrofóbica, caracterizada por unos exacerbados índices de violencia, nihilismo y misoginia, vertía la catártica metamorfosis que experimenta un medroso astrofísico estadounidense tras padecer, junto a su tentadora y desinhibida esposa, la desalmada conducta de los lugareños del represivo pueblo de la campiña de Cornualles donde ella nació y, en especial, del dechado de gentuza que contratan para restaurar la granja donde se instalan. Una obra pesimista, de abrumadora fuerza primitiva y estimable nivel interpretativo, que fue objeto de un estereotipado remake homónimo dirigido por Rod Lurie en 2011.

Otras películas pobladas esencialmente de GENTUZA

La jauría humana – Arthur Penn (1966)
Dogville – Lars Von Trier (2003)
Joker – Todd Phillips (2019)

CREPÚSCULO (Duelo en la alta sierra)

1. Claridad de la luz al salir o ponerse el sol, especialmente la del anochecer.
2. Parte del día en que se produce esta luz.
(google.es)
El Western crepuscular es un subgénero cinematográfico derivado del llamado western. Se trata de un western melancólico, revisionista y desmitificador, que presenta un Oeste en decadencia y a unos protagonistas perdedores, «héroes» cansados, nostálgicos, críticos, desencantados, sucios, resignados, acabados o atormentados. La violencia es explícita. Aunque su realismo es descarnado, no es naturalista como en el spaghetti western; muestra un mundo y unos valores que están a punto o al borde de desaparecer. (Wikipedia)

«La honradez, pretensión extemporánea, y la muerte, plausible redención, son los aditamientos de este western crepuscular, todavía no trastocado por la nervatura narrativa ni el denostado ralentí que pondrán más tarde en evidencia el temperamento exacerbado del legendario director» (sobre Duelo en la alta sierra)
Gonzalo Suárez (1934-) Escritor y director de cine español

DUELO EN LA ALTA SIERRA (Ride the high country) – 1962

Director Sam Peckinpah
Guion N.B. Stone Jr.
Fotografía Lucien Ballard
Música George Bassman
Producción Metro Goldwyn Mayer
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 94m. Color
Reparto Joel McCrea, Randolph Scott, Edgar Buchanan, Mariette Hartley, Ronald Starr, R.G. Armstrong, L.Q. Jones, Warren Oates.

«Un buen matrimonio tiene como una aureola de gloria. Un buen matrimonio es como un animal raro: difícil de encontrar y casi imposible de mantener. Las personas cambian. Es importante tenerlo presente desde el inicio»

En su segundo largometraje, Peckinpah estableció un figurativo puente entre el ocaso del western en su formalismo clásico y el entonces incipiente subgénero crepuscular con el fin de pormenorizar la última aventura de dos veteranos e incompatibles pistoleros, encargados de trasladar un cargamento de oro desde las minas de Alta Sierra hasta la ciudad de Hornitos. A través de los recuerdos, vicisitudes y enfrentamientos que comparten estos dos antiguos héroes, soberbiamente interpretados por Joel McCrea y Randolph Scott (este último en su postrera aparición en pantalla), la película se encargaba de romper viejos tópicos para mostrar las debilidades de las leyendas por medio de una mirada nostálgica, emotiva y poética, no exenta de romanticismo y un soterrado sentido del humor. Pese a que el público no acabó por entender semejante desmitificación del género, el realizador californiano pasó a convertirse en el más inspirado cultivador y renovador del mismo, añadiendo paulatinamente a su estilo un registro mucho más violento y exaltado. Excelente fotografía de Lucien Ballard.

Otros WESTERNS CREPUSCULARES

El hombre del Oeste – Anthony Mann (1958)
El hombre que mató a Liberty Valance – John Ford (1962)
Los valientes andan solos – David Miller (1962)

EXCEPCIÓN (La balada de Cable Hogue)

1. Exclusión de lo que se sale de lo común o normal.
2. Cosa que se aparta de la regla general.
(wordreference.com)

“Nunca olvido una cara, pero con la suya voy a hacer una excepción”
Groucho Marx (1890-1977) Actor, humorista y escritor estadounidense

LA BALADA DE CABLE HOGUE (The ballad of Cable Hogue) – 1970

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Director Sam Peckinpah
Guión John Crawford y Edmund Penney
Fotografía Lucien Ballard
Música Jerry Goldsmith
Producción Warner Bros.
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 121m. Color
Reparto Jason Robards, Stella Stevens, David Warner, Strother Martin, R.G. Armstrong, Slim Peckins, L.Q. Jones, Peter Whitney, Gene Evans.

«Es curioso… No importa si has conocido muchas o pocas, ni con cuántas mujeres has estado. Muy de vez en cuando, una de ellas se te mete dentro. Se te mete muy dentro»

Abandonando momentáneamente la extrema violencia de su anterior western, el soberbia GRUPO SALVAJE (1966), Peckinpah optó por cambiar de registro para abordar el género con un perfil más humano, juguetón e intimista, que, a la postre, depararía una de las obras más hermosas y atípicas de su filmografía. Su argumento, encuadrado en las postrimerías del salvaje Oeste y centrado en la curiosa personalidad de un veterano y sufrido buscador de oro, oscilaba entre su romance con una entrañable prostituta y la esperada venganza contra los que lo traicionaron y abandonaron en pleno desierto, lugar donde montará un abrevadero y una parada para diligencias. Esta nostálgica e irónica fábula moral acerca del triunfo del amor y la bondad sobre la hostilidad e intolerancia del entorno, única incursión en la comedia de su autor, sería guillotinada por los productores en aproximadamente veinte minutos y constituyó un serio descalabro comercial a pesar de su impecable factura, de la que sobresalía la espléndida fotografía de Ballard y una sensacional actuación de la pareja protagonista.

Otras películas que figuran como una EXCEPCIÓN en la filmografía de su realizador

El día de los tramposos – Joseph L. Mankiewicz (1970) / Western
El unicornio – Louis Malle (1975) / Ciencia-ficción
Todos dicen I love you – Woody Allen (1996) / Musical

CONCIENCIA (Pat Garrett y Billy el Niño)

1. Conocimiento del bien y del mal que permite a la persona enjuiciar moralmente la realidad y los actos, especialmente los propios.
2. Sentido moral o ético propios de una persona.
(RAE)

“La conciencia es el mejor juez que tiene un hombre de bien”
José de San Martín (1778-1850) Militar argentino

PAT GARRETT Y BILLY EL NIÑO (Pat Garrett and Billy the Kid) – 1973

pat

Director Sam Peckinpah
Guion John Coquillon
Fotografía Rudy Wurlitzer
Música Bob Dylan
Producción Metro Goldwyn Mayer
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 122m. Color
Reparto James Coburn, Kriss Kristofferson, Richard Jaeckel, Jason Robards, Bob Dylan, Katy Jurado, Chill Wills, Barry Sullivan, Rita Coolidge.

«Llega un momento en la vida de un hombre que hay que pensar en el futuro»

A punto de comenzar su etapa de decadencia, Peckinpah firmó uno de sus mejores largometrajes con esta desmitificadora y fiel aproximación a uno de los episodios más divulgados de la historia del Oeste americano: la trayectoria criminal de Billy el Niño y el inconciliable vínculo de afecto y deber profesional que con él mantuvo el sheriff Pat Garrett. Se trata de un western crepuscular y profundamente desencantado, de un lirismo embriagador, donde su director reflexionaba sobre el desafío a la conciencia o la traición de la amistad adhiriendo a su peculiar sentido de la violencia un brillante tratamiento visual, en el que se daban cita sus habituales ralentíes e imágenes congeladas. Magníficas interpretaciones tanto del sobrio James Coburn como de un inexperto Kris Kristofferson y debut ante las cámaras de Bob Dylan, quien además se encargaría de firmar una adecuadísima banda sonora que incluía uno de las canciones más señeras de su vasto catálogo, Knockin’ on heaven’s door. Pese a ser cruelmente mutilado por los montadores, el largometraje obtuvo una gran acogida por parte de la crítica, aunque su rendimiento en taquilla fue considerablemente escaso.

Otras películas que llaman a las puertas de la CONCIENCIA

Almas sin conciencia – Federico Fellini (1955)
Calle Mayor – Juan Antonio Bardem (1956)
Un hombre para la eternidad – Fred Zinnemann (1966)

RECOMPENSA (Quiero la cabeza de Alfredo García)

Una recompensa es ofrecida a menudo por un grupo como incentivo para la realización de una tarea a alguien no asociado generalmente al mencionado grupo. Las recompensas se anuncian comúnmente para la captura o la recuperación de una persona o de una cosa. Están típicamente representadas en forma de dinero. (Wikipedia)

«Vuelvo y pido perdón por la tardanza, se debe a que hice muchos borradores; me quedan dos o tres viejos rencores y sólo una confianza. Reparto mi experiencia a domicilio y cada abrazo es una recompensa; pero me queda, y no siento vergüenza, nostalgia del exilio» (poema Quiero creer que estoy volviendo)
Mario Benedetti (1920-2009) Escritor, poeta y dramaturgo uruguayo

QUIERO LA CABEZA DE ALFREDO GARCÍA (Bring me the head of Alfredo García) – 1974

quiero

Director Sam Peckinpah
Guion Sam Peckinpah y Gordon Dawson
Fotografía Alex Phillips Jr.
Música Jerry Fielding
Producción Optimus Films/Estudios Churubuscu Azteca
Nacionalidad Estados Unidos/ México
Duración 112m. Color
Reparto Warren Oates, Isela Vega, Gig Young, Emilio Fernández, Kris Kristofferson, Chano Urueta, Donnie Fritts, Chalo González.

«No hay nada sagrado en un agujero en el suelo con un muerto dentro»

La última gran película de Sam Peckinpah, además de una de las más amargas, espontáneas e inclasificables de su carrera, la localizaríamos en esta sofocante ‘road movie’ que hurgaba en la mítica figura del perdedor para describir la búsqueda enloquecida y profanadora de un preciado miembro craneal al que un terrateniente mexicano ha puesto precio (un millón de dólares) con el propósito de vengar el veleidoso embarazo de su hija. Este exasperado ejercicio de vehemencia pasional, matizado por el malévolo afecto de la codicia, constituye una espléndida condensación de los rasgos estilísticos de su autor, substancialmente ostensibles en su poético y crispado sentido de la violencia, su delirante romanticismo o esa satírica agudeza con la que solía teñir su anómalo énfasis crepuscular. Una obra tan fulgurante y estrafalaria como imperfecta, rematada con un desenlace de lo más nihilista y descontrolado, que acrecentaría su inobjetable estimación ante la escasez creativa que imperaba en el cine americano de la época y en la que el propio cineasta se prestaría a interpretar una de sus adecuadas canciones, Bad blood baby.

Otras películas sobre RECOMPENSAS

El delator – John Ford (1935)
Yo creo en ti – Henry Hathaway (1947)
Colorado Jim – Anthony Mann (1953)