Lionel Newman

PARTICIÓN (El estrangulador de Boston)

Reparto o división de un todo en varias partes. (google.es)
Pantalla partida Composición visual en la que el fotograma se fragmenta en dos o más imágenes separadas que no se superponen.

«Años después, cuando por fin completa la irrevocable partición quedaba, de remoto confín llegó el poeta. ¡Ay! Todo campo deslindado estaba, y toda cosa a su señor sujeta» (poema La partición de la tierra)
Friedrich Schiller (1759-1805) Poeta, dramaturgo, filósofo, historiador y editor alemán

EL ESTRANGULADOR DE BOSTON (The Boston strangler) – 1968

Director Richard Fleischer
Guion Edward Anhalt
Fotografía Richard H. Kline
Música Lionel Newman
Producción 20th. Century Fox
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 118m. Color
Reparto Tony Curtis, Henry Fonda, George Kennedy, Hurd Hatfield, Mike Kellin, Jeff Corey, Murray Hamilton, Sally Kellerman, William Marshall.

«Esta es la historia de ‘Albert DeSalvo’, el estrangulador confeso de Boston. Los personajes e incidentes que están a punto de presenciar se basan en hechos reales»

Astuta e inquietante adaptación de un libro homónimo de Gerald Frank en el que se reconstruía la famosa historia de un maníaco sexual, fontanero de profesión y casado con una emigrante alemana, que, entre 1962 y 1964, mantuvo aterrorizada a la metrópoli bostoniana con un bagaje de trece mujeres cruentamente asesinadas. Una crónica brillantemente atildada por Richard Fleischer con un riguroso afán documentalista, que rehusaba cualquier efectismo e indulgencia (si exceptuamos su sensacional tratamiento del entonces vanguardista recurso de la pantalla partida o, más bien, multipantalla) y mantenía una postura absolutamente distante ante los patológicos hechos; circunstancia esta última que insufló a este depurado policíaco de una atmósfera compleja y ambigua, que incluso se permitía entreabrir conjeturas acerca de la definitiva culpabilidad del protagonista. Gracias a una caracterización magistral, Tony Curtis acabó terminantemente con su imagen de actor frívolo y se ganó el respeto de la crítica especializada con una soberbia demostración de su talento interpretativo.

Otras películas que aplican el recurso de PANTALLA PARTIDA

Napoleón – Abel Gance (1927)
Carrie – Brian De Palma (1976)
Annie Hall – Woody Allen (1977)

FEBRERO (La matanza del día de San Valentín)

Segundo mes del año en el calendario gregoriano. Tiene 28 días y 29 en los años bisiestos (…) Fue llamado así en honor a las ‘februa’ en las Lupercales, el festival de la purificación en la Antigua Roma: los sabinos celebraban una fiesta anual de purificación que llamaban ‘februa’, en una fecha que hoy se identifica como el 15 de febrero. Tras la fundación de Roma y el posterior surgimiento del Imperio Romano, la urbe dominante tomó prestado el nombre de las fiestas ‘februas’ para designar el mes en que estas tenían lugar, que por entonces era el último del año. (Wikipedia)

«Yo no quiero un amor civilizado, con recibos y escena del sofá, yo no quiero que viajes al pasado y vuelvas del mercado con ganas de llorar. Yo no quiero vecinas con pucheros, yo no quiero sembrar ni compartir, yo no quiero catorce de febrero, ni cumpleaños feliz» (canción Contigo)
Joaquín Sabina (1949-) cantautor, poeta y pintor español

LA MATANZA DEL DÍA DE SAN VALENTÍN (The St. Valentine’s day massacre) – 1967

Director Roger Corman
Guión Howard Browne
Fotografía Milton Krasner
Música Fred Steiner y Lionel Newman
Producción Los Altons Production
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 99m. Color
Reparto Jason Robards, George Segal, Ralph Meeker, Joseph Campanella, Clint Ritchie, Jean Hale, Jack Nicholson, Bruce Dern, John Agar.

«Debe ser nuevo en esta ciudad, señor. Solo Al Capone mata así»

Una voz en off nos introduce en el legendario Chicago de los bajos fondos revelándonos ciertos datos biográficos para presentar a los sujetos que intervendrán en la recreación de uno de los episodios más famosos en los anales del hampa, como fue la masacre acontecida el 14 de febrero de 1929 y que puso fin a las trifulcas que mantenían las bandas rivales de Al Capone y Bugs Moran. Las circunstancias que precedieron a dicho incidente fueron graduadas con flemática objetividad por Corman, quien, acostumbrado a extraer el máximo rendimiento a limitados recursos técnicos y económicos, aprovechó una dotación presupuestaria de mayor holgura para llevar a cabo una reconstrucción ambiental decorosa, singular y refinada, de un cierto cariz semidocumental y una absoluta carencia de juicios morales, que evidenciaba un singular tacto a la hora de utilizar recursos como el flashback o la elipsis. Agresiva, punzante y dinámica, presume de un atractivo y copioso reparto masculino, nutrido de nombres que más adelante proporcionarían interesantes momentos dentro del género gangsteril.

Otras películas cuyo desarrollo argumental acontece durante el mes de FEBRERO

Orfeo negro – Marcel Camus (1959)
23 F: La película – Chema de la Peña (2011)
Verano en febrero – Jonathan Smith (2013)

JERSEY (El multimillonario)

Prenda de punto elástico, manual o mecánico, de lana, algodón o alguna fibra sintética, cerrado o abierto por delante, con escote o cuello de distinto tipo y generalmente manga larga, que cubre el cuerpo hasta la cadera o medio muslo. (google.es)

“Bajar música es como robar un jersey en unos grandes almacenes”
Teddy Bautista (1943-) Músico y gestor español

EL MULTIMILLONARIO (Let’s make love) – 1960

let's

Director George Cukor
Guion Norman Krasna y Hal Kanter
Fotografía Daniel L. Fapp
Música Lionel Newman
Producción 20th. Century Fox
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 116m. Color
Reparto Marilyn Monroe, Yves Montand, Tony Randall, David Burns, Wilfrid Hyde-White, Michael David, Mara Lynn, Frankie Vaughan.
* Marilyn Monroe – My heart belongs to daddy

«Hubo alguien que dijo que los ricos son pobres con dinero… Pues mentira, el rico nunca es pobre, amigo mío»

Voluptuosa comedia musical inspirada en la homóloga ON THE AVENUE (1937) de Roy del Ruth, que planteaba una respetuosa ojeada al mundo del espectáculo teatral a partir del tesón de un potentado faldero de origen francés por enamorar a toda costa a la cándida protagonista del montaje de Broadway que pretende caricaturizarlo. Con un eximio uso del Cinemascope y la colaboración de tres estrellas del fuste de Milton Berle, Gene Kelly o Bing Crosby, interpretándose a sí mismos, Cukor enlazó airosos números musicales coreografiados por Jack Cole con un sofisticado sentido del humor, demostrando que el poder monetario no garantiza la felicidad pero contribuye enormemente a la consecución de cualquier designio, especialmente de carácter amoroso. Marilyn Monroe, en plena madurez física e interpretativa, vivió una apasionada relación con Yves Montand durante el rodaje, que a punto estuvo de echar al traste su matrimonio con Simone Signoret, y embutida en un jersey azul y mallas negras nos dejó para el recuerdo una de sus canciones más insinuantes, My heart belongs to daddy de Cole Porter.

Otras películas donde aparece un JERSEY icónico

Bullitt – Peter Yates (1968)
Pesadilla en Elm Street – Wes Craven (1984)
El gran Lebowski – Joel Coen (1998)

COMPULSIÓN (Impulso criminal)

Término usado en psicoanálisis que define a un sujeto aparentemente sano que presenta una conducta adictiva u obsesiva irresistible ante una determinada situación subyugante. (Wikipedia)

«La envidia, los celos, la ambición, todo tipo de avidez, son pasiones. El amor es una acción, la práctica de un poder humano, que sólo puede realizarse en la libertad y jamás como resultado de una compulsión».
Erich Fromm (1900-1980) Psicoanalista, psicólogo social y filósofo humanista alemán

IMPULSO CRIMINAL (Compulsion) – 1959

impulso

Director Richard Fleischer
Guion Richard Murphy
Fotografía William C. Mellor
Música Lionel Newman
Producción 20th. Century Fox
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 103m. B/N
Reparto Dean Stockwell, Bradford Dillman, Diane Varsi, Richard Anderson, E.G. Marshall, Orson Welles, Martin Milner, Edd Binns.

«Pido por un tiempo que aprendamos que toda vida es digna de ser salvada. La misericordia es el don más preciado del hombre»

Basándose en la novela homónima que el periodista Meyer Levin escribió sobre el caso Leopold-Loeb, un famoso suceso criminal acaecido en el Chicago de 1924 que inspiró el suspense hitchcockiano de LA SOGA (1948) y que depararía otra elegante revisitación por Tom Kalin en COMPULSIÓN (1992), Fleischer perpetró una turbadora requisitoria contra la intolerante inutilidad de la pena de muerte, discernida con un rigor ético e intelectual tan demoledor como el discurso pronunciado por el jurista defensor en un cierre antológico, que, según cuentan, en la realidad se prolongó durante doce horas. Nada menos que Orson Welles (ojo también a su lapidaria frase final) interpretaba al abogado criminalista de este par de estudiantes de clase alta y tendencia homosexual (uno, frágil, influenciable y ducho en asuntos ornitológicos, el otro vanidoso, pérfido y paranoico) que optan por materializar su desprecio a la sociedad y su supuesta inteligencia superior asesinando gratuitamente a un joven de catorce años. Tremebundo análisis de una patología homicida, tan bien ambientado e interpretado como fotografiado en un propicio Cinemascope.

Otras películas sobre COMPULSIÓN

Marnie, la ladrona – Alfred Hitchcock (1964)
Mejor… imposible – James L. Brooks (1997)
El aviador – Martin Scorsese (2004)