En sociología, los modales son las normas de conducta que ejecutadas demuestran que una persona es correcta, educada y refinada, y que se usan para exteriorizar el respeto hacia otras personas. Son como las leyes que codifican o establecen una norma para la conducta humana, pero se diferencian de las leyes en que no existe un sistema formal para sancionar transgresiones, que no sea la desaprobación social (…) Muchas de las actitudes aceptadas como «buenos modales» suelen estar avaladas por la costumbre (…) ‘Dama’ es un término de uso frecuente para una mujer que sigue modales, el término ‘caballero’ se utiliza como contraparte masculina; aunque estos términos son también de uso frecuente para los miembros de algún grupo o clase social. (Wikipedia)
“Los buenos modales son la flor de la humanidad. El que no es suficientemente cortés no es suficientemente humano”
Petrus Jacobus Joubert (1834-1900) Militar y político sudafricano
GIGÍ (Gigí) – 1958
Director Vincente Minnelli
Guion Alan Jay Lerner
Fotografía Joseph Ruttenberg
Música Frederick Loewe y André Previn
Producción Metro Goldwyn Mayer
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 119m. Color
Reparto Leslie Caron, Louis Jordan, Maurice Chevalier, Hermione Gigold, Eva Gabor, Jacques Bergerac, Isabel Jeans, John Abbott.
«Las malas maneras en la mesa han destruido más hogares que la infidelidad»
A pesar de verse obligado a aligerar su atrevido contenido, Minnelli supo preservar el sano cinismo que emanaba del carismático y almidonado relato costumbrista de Colette, y, haciendo gala de su talento para dosificar los recursos dramáticos dentro de una puesta en escena siempre vibrante y luminosa, reconstruyó impecablemente el París de principios de siglo XX para narrar la historia de la hermosa muchacha adiestrada en los buenos modales por su tía para moverse entre la alta sociedad con fines casamenteros. Una magnífica banda sonora nutrida de pegadizos temas de Alan Jay Lerner y André Previn, algunos tan inolvidables como Thank heaven for little girls o I remember it well, ambos cantados por el emblemático Maurice Chevalier, el bellísimo diseño de vestuario de Cecil Beaton, la memorable fotografía en Cinemascope de Ruttenberg, y, por supuesto, la angelical interpretación de Leslie Caron, se erigieron en los principales factores que contribuyeron al multioscarizado éxito de esta deliciosa aunque no demasiado bien envejecida producción del inefable Arthur Freed.
Otras películas sobre lecciones de BUENOS MODALES
Pygmalion – Anthony Asquith (1938)
Nacida ayer – George Cukor (1950)
El rey y yo – Walter Lang (1956)