Kathleen Turner

ADOLESCENCIA (Las vírgenes suicidas)

Periodo de desarrollo biológico, psicológico, sexual y social inmediatamente posterior a la niñez y que comienza con la pubertad. Es un periodo vital entre la pubertad y la edad adulta, su rango de duración generalmente se enmarca su inicio entre los 12 y 13 años, y su finalización a los 18 años de edad (…) Se llama adolescencia, porque sus protagonistas son jóvenes que aún no son adultos y tampoco son niños. Es una etapa de descubrimiento de la propia identidad (identidad psicológica, identidad sexual…) así como la de autonomía individual. En el aspecto emocional, la llegada de la adolescencia significa la eclosión de la capacidad afectiva para sentir y desarrollar emociones que se identifican o tiene relación con el amor. (Wikipedia)

“La adolescencia es la única época en la que he aprendido algo”
Marcel Proust (1871-1922) Escritor francés

LAS VÍRGENES SUICIDAS (The virgin suicides) – 1999

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Director Sofia Coppola
Guion Sofia Coppola
Fotografía Corine Day
Música Brian Reitzell
Producción American Zoetrope/Muse Productions/Eternity Pictures
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 97m. Color
Reparto Kirsten Dunst, James Woods, Kathleen Turner, Josh Hartnett, Scott Glenn, Michael Paré, Danny DeVito, A.J. Cook.
* Air – Playground love

“Empezamos a enterarnos de su vida llegando a recordar cosas que no habíamos vivido. Supimos lo que era ser una chica y cómo el serlo te hacía soñar y saber qué colores combinaban bien. Supimos que las chicas eran mujeres disfrazadas que entendían el amor, e incluso la muerte, y que nuestro trabajo era hacer el ruido que las fascinaba. Lo sabían todo sobre nosotros y nosotros nada sobre ellas…”

Resarciéndose de su poco estimulante cometido como actriz, en especial, del ensañamiento crítico sufrido por su papel como hija de Michael Corleone en EL PADRINO III, Sofia Coppola triunfó en su debut como realizadora de largometrajes con esta fiel y etérea adaptación de la novela homónima con la que Jeffrey Eugenides hurgó en el secreto de la feminidad y la pérdida de la inocencia, asociada al sinuoso hechizo del devenir adolescente. Ambientada en un barrio residencial de Grosse Pointe (Michigan), a mediados de los setenta, evocaba con calidez, poética ensoñación ambiental y loable vigor descriptivo los trágicos incidentes vinculados a las cinco hermanas Lisbon, hijas de un profesor de matemáticas y una ama de casa beata, autoritaria y sobreprotectora. Narrada en primera persona del plural por los vecinos y condiscípulos que asistieron atónitos a los macabros acontecimientos, fundamenta su capacidad de impacto emocional en una ingrávida puesta en escena de nostálgico onirismo, un impecable estilo visual de estética setentera y una hipnótica banda sonora a cargo del dúo francés de música electrónica Air.

Otras películas claves para entender la ADOLESCENCIA

Juno – Jason Reitman (2007)
Las ventajas de ser un marginado – Stephen Chbosky (2012)
La vida de Adèle – Abdellatif Kechiche (2013)

TRAICIÓN (El honor de los Prizzi)

Falta que quebranta la lealtad o fidelidad que se debería guardar hacia alguien o algo. Consiste en renegar, ya sea con una acción o con un dicho, de un compromiso de lealtad (…) la traición es aquella falta que quebranta la lealtad o fidelidad que se debería guardar hacia alguien o algo. Consiste en renegar, ya sea con una acción o con un dicho, de un compromiso de lealtad. (definicion.de)

«La traición la emplean únicamente aquellos que no han llegado a comprender el gran tesoro que se posee siendo dueño de una conciencia honrada y pura»
Vicente Espinel (1550-1624) Sacerdote, escritor y músico español del Siglo de Oro

EL HONOR DE LOS PRIZZI (Prizzi’s honor) – 1985

prizzi

Director John Huston
Guion Richard Condon y Janet Roach
Fotografía Oswald Morris
Música Alex North
Producción 20th. Century Fox
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 129m. Color
Reparto Jack Nicholson, Kathleen Turner, Robert Loggia, Anjelica Huston, William Hickey, Lee Richardson, Michael Lombard, John Randolph.

«Cuando te miro veo solo lo que quiero ver. Eso es el amor.»

Olvidado el contraproducente e indigno lapso comercial en el que incurrió a principios de los ochenta, John Huston reavivó su ya maltrecha salud para llevar a cabo una negrísima caricatura de los clásicos esquemas temáticos y argumentales del cine inspirado en las actividades del crimen organizado, sustituyendo la violencia intrínseca del género por una puesta en escena tersa, pragmática y elegante, matizada por una sutil socarronería dialéctica y ese brío descriptivo que siempre poseyó su ecléctico temperamento estilístico. Un soberbio conjunto de interpretaciones, del que sobresalía Kathleen Turner en el rol de una de las ‘femmes fatales’ más voraces y concupiscentes que se recuerdan, conformaban los iconos burlescos sobre los que se edificaba esta frenética, tempestuosa e imprevisible trama de pasiones irreprimibles y afectividades traicionadas, según la novela homónima de Richard Condon, fotografiada con el empaque característico de Oswald Morris y ornamentada por una inspirada banda sonora de Alex North, que adecuaba de forma precisa algunos fragmentos de El barbero de Sevilla.

Otras películas sobre la TRAICIÓN

Las damas del bosque de Bolonia – Robert Bresson (1945)
Forajidos – Robert Siodmak (1946)
Traidor en el infierno – Billy Wilder (1953)

ARDOR (Fuego en el cuerpo)

1. Calor muy intenso.
2. Sensación de calor vivo en una parte del cuerpo.
3. Sentimiento muy fuerte, apasionado o entusiasta.
(Larousse Editorial)

“Ten fe ciega no en tu capacidad para el triunfo, sino en el ardor con que lo deseas”
Horacio Quiroga (1878-1937) Cuentista, dramaturgo y poeta uruguayo

FUEGO EN EL CUERPO (Body heat) – 1981

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Director Lawrence Kasdan
Guion Lawrence Kasdan
Fotografía Richard H. Kline
Música John Barry
Producción Warner Bros.
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 113m. Color
Reparto William Hurt, Kathleen Turner, Richard Crenna, Ted Danson, J.A. Preston, Mickey Rourke, Kim Zimmer, Jane Hallaren, Laura Saunders.

«Tú tienes la culpa. Me has hecho insaciable. Nunca lo había deseado tanto»

Una vez demostrada su solvencia como guionista, Lawrence Kasdan emprendió su carrera como realizador con esta estimulante aproximación a los patrones temáticos del tradicional cine negro americano. El argumento, excesivamente parecido a algunas célebres novelas de James M. Cain, convertidas en grandes clásicos de los cuarenta, narraba como en una sofocante zona de Florida un abogado oportunista cae en las deletéreas garras de una ardiente ‘femme fatale’, y, tras vivir juntos una apasionada e intensa relación, decide colaborar con ella para asesinar a su marido. El cineasta de Miami acomodaría la historia en una brillante puesta en escena, dotándola de una atmósfera enrarecida e imprimiendo al relato una persuasiva e incendiaria carga erótica, a la postre, fundamental de cara a su posterior e inesperado éxito comercial. Tupida crónica de ávidas traiciones y perdición, aderezada con unas dosis de arrollador feminismo, poseía una envolvente música de John Barry y sacaba el máximo partido a una electrizante pareja protagonista, formada por un convincente William Hurt y una debutante tan sensual como explosiva, Kathleen Turner.

Otras películas cuyo visionado provoca una sensación de ARDOR

Duelo al sol – King Vidor (1946)
La noche de la iguana – John Huston (1964)
La ley del deseo – Pedro Almodóvar (1987)