1. Sueño desagradable que produce miedo o angustia.
2. Preocupación grave y continua por un asunto importante o por el temor a un peligro o adversidad. (K Dictionaries Ltd.)
“Dales placer, el mismo que consiguen cuando despiertan de una pesadilla”
Alfred Hitchcock (1899-1980) Director y productor de cine británico
LA HORA DEL LOBO (Vargtimmen) – 1968
Director Ingmar Bergman
Guion Ingmar Bergman
Fotografía Sven Nykvist
Música Lars Johan Werle
Producción Svensk Filmindustri
Duración 90m. B/N
Reparto Max Von Sydow, Liv Ullmann, Gertrud Fridh, Erland Josephson, Ulf Johansson, Ingrid Thulin, Georg Rydeberg, Naime Wilfstrand.
«¿No crees que las personas que han vivido juntas gran parte de sus vida acaban pareciéndose? Al final tienen tanto en común…»
Probablemente la película más retorcida, malévola y aterradora de la filmografía bergmaniana, en la que se revelaba el vejatorio suplicio espiritual al que es sometido un hosco pintor, casado y establecido en la isla de Fresia, a partir de una inquietante representación onírica de sus angustiosas remembranzas, aprensiones y paranoias. El maestro sueco reconvirtió un guion de 1954 titulado Los caníbales, claramente influenciado por la insólita fabulación romántica de E.T.A. Hoffmann, en una nueva incursión alegórica y metafísica por los oscuros meandros del vampirismo intelectual, que fusionaba un recio naturalismo psicológico con una acepción dramática entre excéntrica y sobrenatural hasta establecer una sutil y erudita tergiversación expresiva acerca del malsano vínculo anímico que el artista sostiene con la crítica y sus seguidores incondicionales. Impresionante empleo de la fotografía como transmisora de emociones a cargo de Sven Nykvist y espléndida labor interpretativa de todo el reparto, encabezado por un pletórico Max Von Sydow.
Otras películas concebidas a modo de una enorme PESADILLA
El proceso – Orson Welles (1962)
Plan diabólico – John Frankenheimer (1966)
El quimérico inquilino – Roman Polanski (1976)
Siempre he pensado que Bergman sería un excelente dirección de terror, capaz de provocar sensaciones malsanas muy penetrantes y desasosegantes. Escenas de esta película, como la del niño en la playa, así lo apuntan.
Me gustaMe gusta
Cierto. Muy probablemente sea la película de su filmografía que mejor atestigua tu reflexión, aunque ya dejó muestras de su capacidad para crear ese tipo de atmósferas en multitud de películas («Persona», «El silencio», «El manantial de la doncella», «Fanny y Alexander», etc.).
Me gustaMe gusta