Robert Donat

VOCACIÓN (Adiós, Mr. Chips)

Inclinación o interés que una persona siente en su interior para dedicarse a una determinada forma de vida o un determinado trabajo. (google.com)

“Si piensas que tu profesor es duro, espera a que tengas un jefe. Ese sí que no tendrá vocación de enseñanza ni la paciencia requerida”
Bill Gates (1955-) Empresario y filántropo estadounidense

ADIÓS MR. CHIPS (Goodbye Mr. Chips) – 1939

chips

Director Sam Wood
Guion Claudine West, Sidney Franklin, R.C. Sherriff y Eric Marschwitz
Fotografía Freddie Young
Música Richard Addinsell
Producción Metro-Goldwyn-Mayer
Nacionalidad Reino Unido
Duración 114m. B/N
Reparto Robert Donat, Greer Garson, John Mills, Terry Kilburn, Paul Henreid, Judith Furse, Lyn Harding, Frederick Leister, Milton Rosmer.

«Debe ser muy interesante ser maestro de escuela (…) Ver crecer y ayudar a los alumnos, ver como desarrollan su personalidad y ver dónde llegan cuando dejan la escuela y se enfrentan al mundo. No sé cómo puede hacerse viejo en un mundo que siempre es joven»

Una vez concluida su colaboración con los hermanos Marx en dos de sus mejores películas, y, poco antes de ejercer como director (de forma no acreditada) en las últimas diez semanas de rodaje de LO QUE EL VIENTO SE LLEVÓ, Sam Wood evidenció su eficacia tras la cámara en esta apreciable adaptación de la novela homónima de James Hilton, alcanzando uno de los mayores éxitos de su carrera. A partir de un largo flashback, evocaba los pequeños sinsabores que jalonan la conmovedora trayectoria vital y profesional de un maestro inglés (excelente Robert Donat) vinculado al ficticio colegio público de Brookfield, desde sus inicios como retraído profesor de latín y griego en 1870 hasta su tardía jubilación como carismático docente en pleno período de la Gran Guerra. Valores como la lealtad, perseverancia, respeto, sensatez, disciplina y, sobre todo, vocación por la enseñanza, festonean esta satinada hechura de comedia y drama sentimental, versionada en clave musical treinta años después por Herbert Ross, con Peter O’Toole en el papel protagonista.

Otras películas que ensalzan el entusiasmo y esfuerzo por una VOCACIÓN profesional

El manantial – King Vidor (1949) / arquitecto
El cardenal – Otto Preminger (1963) / clérigo
Barbarroja – Akira Kurosawa (1965) / médico

MACGUFFIN (39 escalones)

Elemento de suspense que hace que los personajes avancen en la trama, pero que no tiene mayor relevancia en la trama en sí. MacGuffin es una expresión acuñada por Alfred Hitchcock que designa una excusa argumental que motiva a los personajes y al desarrollo de una historia, pero carece de relevancia por sí misma. El elemento que distingue al MacGuffin de otros tipos de excusas argumentales es que es intercambiable. Desde el punto de vista de la audiencia, el McGuffin no es lo importante de la historia narrada. (Wikipedia)

“La palabra procede de esta historia: van dos hombres en un tren y uno de ellos le dice al otro ‘¿Qué es ese paquete que hay en el maletero que tiene sobre su cabeza’. El otro contesta: ‘Ah, eso es un mcguffin’. El primero insiste: ‘¿Qué es un mcguffin?’, y su compañero de viaje le responde ‘un macguffin es un aparato para cazar leones en Escocia’. ‘Pero si en Escocia no hay leones’, le espeta el primer hombre. ‘Entonces eso de ahí no es un MacGuffin’, le responde el otro” (libro El cine según Hitchcock)
Alfred Hitchcock (1899-1980) Director de cine y productor británico

LOS 39 ESCALONES (The 39 steps) – 1935

steps

Director Alfred Hitchcock
Guion Charles Bennett e Ian Hay
Fotografía Bernard Knowles
Música Charles Williams, Hubert Bath y Jack Beaver
Producción Gaumont/British
Nacionalidad Reino Unido
Duración 81m. B/N
Reparto Robert Donat, Madeleine Carroll, Godfrey Tearle, Peggy Ashcroft, John Laurie, Lucie Mannheim, Helen Haye, Frank Cellier.

«Un mundo de donde la sospecha, la crueldad y el miedo hayan sido disipados para siempre, ¡Éste es el tipo de mundo que yo quiero!»

A pesar de sentirse algo molesto por la excesiva manipulación del argumento, el especialista en novelas de espionaje John Buchan no tuvo más remedio que rendirse al axiomático talento de Hitchcock y aceptar que esta portentosa conjunción de intriga y romanticismo había conseguido eclipsar su original literario. Por primera vez en su obra, el realizador británico utilizaba el elemento de suspense que más tarde Angus McPhail bautizaría como ‘macguffin’ y desarrollaba el que iba a convertirse en uno de sus temas más obstinadamente recurrentes: la implacable persecución de un falso culpable que se ve forzado a buscar a los auténticos malhechores para demostrar su inocencia, en esta ocasión, un joven canadiense que huía desde Londres hasta Escocia con el apremiante objetivo de desenmascarar a una organización de espías. Tensión incesante, ironía amenazadora y erotismo refinado se integraron a la perfección en el largometraje británico más exitoso de su autor, protagonizado por una pareja de actores excepcionales y dotado de un ritmo vertiginoso, efervescente y, tal como ratificaron los grises remakes de Ralph Thomas (1959) y Don Sharp (1978), decididamente inimitable.

Otras películas que utilizan un MACGUFFIN como elemento de suspense

Ciudadano Kane – Orson Welles (1941)
El halcón maltés – John Huston (1941)
Bella de día – Luis Buñuel (1966)

GLOTONERÍA (La vida privada de Enrique VIII)

Conducta de la persona que come con ansia y en exceso. (google.es)

“La desigualdad, hoy, no se puede atribuir sólo a la insaciable glotonería capitalista, aunque es indiscutible que ésta fue artífice y sostenedora de su inicial creación y desarrollo”
Rubén Blades (1948-) Cantante, compositor, músico, actor y abogado panameño

LA VIDA PRIVADA DE ENRIQUE VIII (The private life of Henry VIII) – 1933

Director Alexander Korda
Guion Lajos Biro y Arthur Wimperis
Fotografía Georges Perinal
Música Kurt Schröder
Producción London Film
Nacionalidad Gran Bretaña
Duración 97m. B/N
Reparto Charles Laughton, Robert Donat, Miles Mander, Elsa Lanchester, Merle Oberon, Wendy Barrie, Binnie Barnes, Franklin Dyall.

«Todas las mujeres se consideran la esposa adecuada para el marido de otra mujer»

Bulliciosa e irreverente reconstrucción de las desventuras matrimoniales del más despótico e insaciable monarca surgido de la familia Tudor, que ha pasado a la historia del celuloide por significar el primer éxito internacional de la cinematografía británica en su etapa sonora y el auténtico impulsor del prestigio que ésta cosecharía en sus subsiguientes años. Beneficiado de la excelente labor escenográfica de su hermano Vincent, Alexander Korda construyó una esmerada película que desdeñaba toda rigurosidad histórica para moverse con presteza en una contextura de comedia que oscilaba entre lo bufo y lo picaresco y, cuyo principal aliciente, residía en la exuberante caracterización física y psicológica que el orondo Charles Laughton hizo del repulsivo soberano de marras, que tomaba como modelo el célebre retrato El joven de Hans Holbein y a la que regresó veinte años después en LA REINA VIRGEN de George Sidney. Entre el resto del reparto, sobresalía la presencia de una joven Merle Oberon, que, en 1939, acabaría convirtiéndose en la esposa del polifacético realizador.

Otras películas cuyo protagonista destaca por su GLOTONERÍA

Los asesinos de la luna de miel – Leonard Kastle (1969)
La gran comilona – Marco Ferreri (1973)
Super size me – Morgan Spurlock (2004)