Agnes Moorehead

SUBJETIVIDAD (La senda tenebrosa)

Propiedad de las percepciones, argumentos y lenguaje basados en el punto de vista del sujeto, y por tanto influidos por los intereses y deseos particulares del mismo. Su contrapunto es la objetividad, que los basa en un punto de vista intersubjetivo, no prejuiciado, verificable por diferentes sujetos. (Wikipedia)
El plano subjetivo es la toma que nos muestra directamente el punto de vista de un personaje, o sea que vemos la acción y los acontecimientos como si fuésemos el personaje mismo dentro de la película. (Wikipedia)

“La subjetividad es la auto-estafa más grande que puede uno hacerse a sí mismo”
Leandro Kabakian (1985-) Abogado comunitario, político y escritor argentino

LA SENDA TENEBROSA (Dark passage) – 1947

senda

Director Delmer Daves
Guion Delmer Daves
Fotografía Sidney Hickox
Música Franz Waxman
Producción Warner Bros./First National
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 106m. B/N
Reparto Humphrey Bogart, Lauren Bacall, Bruce Bennett, Clifton Young, Tom D’Andrea, Agnes Moorehead, Douglas Kennedy, Rory Mallinson.

«Así es la vida, una batalla campal desde el principio. A nadie le importa nadie, a nadie le importa un bledo lo que le pase a los demás. Hubo un tiempo en que los hombres se echaban mutuamente una mano»

Irreprochable clásico del cine negro, recamado con aliento romántico y pinceladas de un tenebroso y psicológico dramatismo, que adecuaba al cine la novela homónima del especialista David Goodis sobre la fuga de un convicto injustamente encarcelado por homicidio y su venturoso contacto con una atractiva mujer que le asistirá hasta el punto de procurarle una operación de cirugía estética. Habitualmente invocado por una eficaz aplicación del plano subjetivo durante la primera media hora para así no tener que revelar el semblante original del protagonista (de hecho, su rostro no se vislumbra hasta pasada una hora del metraje), brindaba un íntegro muestrario de la dinámica precisión narrativa y el abrumador carácter poético de su infravalorado realizador a pesar de la inverosimilitud del planteamiento argumental y su enrevesado desarrollo. Ejemplarmente ambientada en la inconfundible San Francisco, ofrecía el penúltimo recital de esa impresionante química irradiada por la carismática pareja Bogart/Bacall y, además, hacía gala de un magnífico trabajo de fotografía a cargo de Sidney Hickox.

Otras películas con una profusa utilización del PLANO SUBJETIVO

El hombre y el monstruo – Rouben Mamoulian (1931)
La dama del lago – Robert Montgomery (1947)
El resplandor – Stanley Kubrick (1980)

FOLLETÍN (Obsesión)

1. Obra literaria o cinematográfica que presenta una historia sentimental en la que abundan elementos para conmover al público, con una escasa elaboración psicológica de los personajes y que muestra una visión maniqueísta y estereotipada de la realidad.
2. Hecho o situación de la vida real que es tan increíble que parece propio de estas obras.
(Larousse Editorial)

«Una cosa lamento: no saber lo que va a pasar. Abandonar el mundo en pleno movimiento, como en medio de un folletín. Yo creo que esta curiosidad por lo que suceda después de la muerte no existía antaño, o existía menos, en un mundo que no cambiaba apenas.»
Luis Buñuel (1900-1983) Director de cine español

OBSESIÓN (Magnificent obsession) – 1954

obsesión

Director Douglas Sirk
Guion Robert Blees
Fotografía Russell L. Metty
Música Frank Skinner
Productora Universal
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 108m. Color
Reparto Jane Wyman, Rock Hudson, Agnes Moorehead, Barbara Rush, Otto Kruger, Gregg Palmer, Sara Shane, Paul Cavanagh, Judy Nugent.

«Dedicar nuestra vida a los demás, sujetarla al temperamento de cualquier otra persona, no crea que es empresa fácil.»

Espléndido remake de un más que cualificado melodrama de John M. Stahl (1935), basado a su vez en la homónima primera novela de Lloyd C. Douglas, que constituye la primera gran película surgida de la fructífera colaboración de Douglas Sirk con el productor Ross Hunter para la Universal; relación, que, durante los años cincuenta, aportaría al género diversas obras maestras, en su mayoría prácticamente ignoradas por la crítica de su tiempo. La folletinesca redención de un arrogante playboy, que retoma la carrera de medicina con el fin de convertirse en cirujano y devolverle la vista a su amada (a quien él mismo dejó ciega y viuda por culpa de un accidente náutico), se transformaba en manos del realizador de origen alemán en una prodigiosa disertación cinematográfica sobre estilización, fuerza poética e intensidad emocional, manifestada por medio de una serena e incisiva utilización de recursos de estilo. Mirada rígida y reprobable de la sociedad norteamericana y sus ‘buenas costumbres’, poseía además una deslumbrante fotografía en Technicolor y un extraordinario trabajo de la peculiar pareja protagonista.

Otros FOLLETINES cinematográficos

Lo que el viento se llevó – Victor Fleming (1939)
Duelo al sol – King Vidor (1946)
La fuerza del cariño – James L. Brooks (1983)

HOGAR (Desde que te fuiste)

El término hogar es utilizado muy corrientemente por las personas para denominar el lugar donde viven y que está estrechamente relacionado con una sensación de seguridad, confort, pertenencia y calma, en tanto, se eligió esta palabra y no otra por la otra acepción que también tiene el término, que es el sitio de la casa en el que se prende el fuego y en el cual solía reunirse la familia en el pasado cuando no existían las estufas o los splits frío/calor para calentarse y alimentarse. http://www.definicionabc.com/social/hogar.php

“Los mejores momentos de mi vida han sido aquellos que he disfrutado en mi hogar, en el seno de mi familia”
Thomas Jefferson (1743-1826) Tercer presidente de los Estados Unidos de América

DESDE QUE TE FUISTE (Since you went away) – 1944

desde2

Director John Cromwell
Guion David O. Selznick
Fotografía Stanley Cortez y Lee Garmes
Música Max Steiner
Producción United Artists
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 172m. B/N
Reparto Claudette Colbert, Jennifer Jones, Shirley Temple, Joseph Cotten, Monty Woolley, Agnes Moorehead, Robert Walker, Lionel Barrymore.

«Me alisté porque mi vida me parecía insulsa y quería tener diversión y emociones. Y me reía en sueños de esos tipos que se enrolaban por causas nobles, por la libertad y todo lo demás, pero descubrí que todo se resumía en una simple y rancia frase de la que no me podía reir: ‘Hogar, dulce hogar'»

Superlativa adaptación de la novela Since you went away: Letters to a soldier from his wife de Margaret Buell Wilder, que, con casi toda seguridad, merece ser considerada como el exponente más perfecto, ambicioso y enternecedor de aquel coyuntural subgénero melodramático con trasfondo bélico y decididas intenciones propagandísticas gestado en Hollywood durante la Segunda Guerra Mundial. Las amargas vicisitudes cotidianas por las que atraviesa una familia de clase media tras la llamada a filas del cabeza de la misma conformaban un cuadro costumbrista idóneo para enaltecer los valores clásicos del hogar norteamericano y, de paso, consolar a las muchísimas mujeres que se tambaleaban entre el desasosiego y la esperanza mientras aguardaban el retorno de los suyos. El infravalorado John Cromwell confirió al estupendo guión del mismísimo David O’Selznick una puesta en escena de acrisolada intensidad dramática, primorosa plasticidad y un pertinente sentido del humor; factores, que, yuxtapuestos a su insuperable reparto y a la oscarizada música de Steiner acababan consagrándola como una de las grandes películas americanas de la década.

Otras películas consignadas a enaltecer la fuerza del HOGAR

Las cuatro hermanitas – George Cukor (1933)
¡Qué verde era mi valle! – John Ford (1941)
Primavera tardía – Yasujiro Ozu (1949)

INDUSTRIALIZACIÓN (El cuarto mandamiento)

Proceso por el que un Estado o comunidad social pasa de una economía basada en la agricultura a una fundamentada en el desarrollo industrial y en el que éste representa en términos económicos el sostén fundamental del Producto Interior Bruto y en términos de ocupación ofrece trabajo a la mayoría de la población (…) El proceso de industrialización no fue homogéneo, es decir, no fue todo en un solo paso, sino primero Gran Bretaña en el siglo XVIII, otros países como Estados Unidos, Japón y Rusia en el siglo XIX fueron industrializados y actualmente hay países de África o Asia que están muy poco industrializados. (Wikipedia)

“En las luchas contra el imperialismo económico extranjero, por la industrialización nacional, por la justicia en los campos, contra el parasitismo de los grandes rentistas, etc., la posición que conviene a los trabajadores es la posición misma del interés nacional”
Ramiro Ledesma Ramos (1905-1936) Novelista, periodista e ideólogo español

EL CUARTO MANDAMIENTO (The magnificient Ambersons) – 1942

cuarto

Director Orson Welles
Guion Orson Welles
Fotografía Stanley Cortez
Música Bernard Herrmann
Producción RKO/Mercury Productions
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 88m. B/N
Reparto Joseph Cotten, Dolores Costello, Anne Baxter, Agnes Moorehead, Ray Collins, Tim Holt, Erskine Sanford, Richard Bennett.

«La vida y el dinero se escapan como bolitas de mercurio entre los dedos»

La segunda película de Orson Welles y la única en la que no participó como actor fue este apasionante melodrama familiar, basado en la premiada novela homónima de Booth Tarkington, que, a pesar de la mutilación efectuada por la productora durante su montaje, conserva todo su vigor y coherencia, erigiéndose en una de las grandes obras maestras de su filmografía. Las vicisitudes de una rancia, engreída y ambiciosa familia de la anquilosada aristocracia de Indianápolis y sus enormes dificultades para adaptarse a los nuevos tiempos dominados por la industrialización y el ocaso de la plutocracia dieron pie a un romántico fresco social ubicado a finales del siglo XIX y principios del XX, donde volvía a resaltar la sobrecogedora puesta en escena wellesiana urdida a base de angulaciones, combinaciones de luz insólitas y decorados de una creatividad exacerbada. Una solemne e implacable meditación sobre el paso del tiempo y la fragilidad del poder, llena de momentos tan inolvidables como la secuencia del baile o el famoso epílogo, en el que el narrador, o sea el propio autor, culmina la obra apostillando: «He escrito y dirigido este film. Mi nombre es Orson Welles»

Otras películas sobre la INDUSTRIALIZACIÓN

Lo viejo y lo nuevo – S.M.Eisenstein y G.Alexandrov (1929)
La tierra de la gran promesa – Andrzej Wajda (1975)
Daens – Stijn Coninx (1992)