Ernst Lubitsch

TRÍO (Una mujer para dos)

Grupo de tres personas o cosas unidas por alguna relación. (servicios.elpais.com)

«El éxito es ese viejo trío: habilidad, oportunidad y valentía»
Charles Luckman (1909-1999) Arquitecto estadounidense

UNA MUJER PARA DOS (Design for living) – 1933

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Director Ernst Lubitsch
Guion Ben Hecht y Samuel Hoffenstein
Fotografía Victor Milner
Música John Leipold
Producción Paramount
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 91m. B/N
Reparto Miriam Hopkins, Gary Cooper, Fredric March, Edward Everett Horton, Isabel Jewell, Franklin Pangborn, Jane Darwell, Lionel Belmore.

«La inmoralidad puede ser divertida, pero no lo suficiente como para sustituir a un cien por cien de virtud y tres comidas al día»

Atrevida y desenfadada adaptación de una pieza teatral de Noel Coward, que, bajo un envoltorio de resuelta liviandad y falsa ligereza, proponía una maniobra de subversión de lo cotidiano tan aviesa como epicúrea al plantear la anómala sociedad artística y afectiva que una joven publicitaria entabla al unísono con dos íntimos artistas bohemios (un pintor y un dramaturgo) del barrio parisino de Montmartre. A pesar de la reservada pero manifiesta carencia de pretensiones con la que fue concebida, Lubitsch desplegó un virtuoso recital de los distintivos estilísticos que diferenciarían su particular e inimitable talante como realizador, es decir, una puesta en escena de cáustico refinamiento y aparente sensación de espontaneidad, impregnada de solapadas sugerencias sexuales gracias a la chispeante astucia de los diálogos y a una incomparable facultad para la elipsis y la utilización del fuera de campo. Triángulo interpretativo de una química perfecta, con una maravillosa Miriam Hopkins, para un film que versaba sobre el deseo, el amor ideal o la amistad traicionada en aras a testimoniar la viabilidad del trío como modelo de vida en común.

Otras películas protagonizadas por un TRÍO

El trío fantástico – Tod Browning (1925)
Jules y Jim – François Truffaut (1962)
Y tu mamá también – Alfonso Cuarón (2001)

COQUETEO (Los peligros del Flirt)

Insinuación sexual o romántica de una persona a otra, indicando que se tiene un interés sexual. La coquetería es un tipo de práctica seductiva que se apega al código de etiqueta social, el cual generalmente desaprueba la expresión directa del interés sexual. El coqueteo suele relacionarse con el género femenino, aunque el término se usa actualmente en forma más genérica tanto para mujeres como para hombres. (Wikipedia)

«Una mujer bonita no coquetea, simplemente sonríe»
Marilyn Monroe (1926-1962) Actriz estadounidense

LOS PELIGROS DEL FLIRT (The marriage circle) – 1924

Director Ernst Lubitsch
Guión Paul Bern
Fotografía Charles Van Enger
Música Edgar Istel
Producción Warner Bros.
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 92m. B/N
Reparto Florence Vidor, Monte Blue, Marie Prevost, Creighton Hale, Adolphe Menjou, Harry Myers, Dale Fuller, Esther Ralston.

«Simplemente quería demostrar cuán espantosamente descuidado es su marido para dejarla sola en la oscuridad de la noche. ¿Cómo puede un marido que ama a su esposa, descuidarla así?»

En la primera de una serie de cinco películas para la Warner Bros., Lubitsch encauzó una sofisticada comedia de equívocos con pinceladas melodramáticas que preludiaba el toque refinado, irónico y engañosamente ligero que el realizador alemán cultivaría a lo largo de toda su carrera norteamericana y que tanto influiría en posteriores especialistas del género como Hawks, Cukor, Capra o LaCava. La cinta, basada en la pieza teatral Nur ein traum de Lothar Godschmidt, logró con fortuna sortear los inflexibles códigos morales de la época para presentar una sardónica mirada al matrimonio como lapso amoroso encaminado a perecer con la rutinaria monotonía cotidiana a través de los coqueteos y las infidelidades, que, con la contribución de un galán de circunstancias, protagonizaban dos antagónicas parejas pertenecientes a la burguesía vienesa de principios del siglo XX. Ocho años más tarde, el propio Lubitsch filmaría una versión en clave musical, UNA HORA CONTIGO, ajena a la ironía, la frescura descriptiva, el sutil erotismo y la desenvoltura actoral que ésta desprendía.

Otras películas sobre COQUETEOS

Erotikon – Mauritz Stiller (1920)
Los caballeros las prefieren rubias – Howard Hawks (1953)
Belle epoque – Fernando Trueba (1992)

FONTANERÍA (El pecado de Cluny Brown)

Actividad relacionada con la instalación y mantenimiento de redes de tuberías para el abastecimiento de agua potable y evacuación de aguas residuales, así como las instalaciones de calefacción en edificaciones y otras construcciones. (Wikipedia)

«¿Me aplaudirían si fuese un buen fontanero?»
Marlon Brando (1924-2004)

EL PECADO DE CLUNY BROWN (Cluny Brown) – 1946

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Director Ernst Lubitsch
Guion Samuel Hoffenstein y Elizabeth Reinhardt
Fotografía Joseph LaShelle
Música Cyril J. Mockridge
Producción 20th. Century Fox
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 100m. B/N
Reparto Charles Boyer, Jennifer Jones, Peter Lawford, Helen Walker, Reginald Gardiner, Reginald Owen, C. Aubrey Smith, Richard Haydn.

«Nunca debe convertirse en víctima de mis circunstancias. Y, llegado el caso de que usted me pareciera romántico, no lo dude ni un instante, deme un puntapié»

Dos años antes de que la muerte lo sorprendiera de manera prematura con un paro cardíaco en pleno rodaje de LA DAMA DEL ARMIÑO, una comedia musical algo empalagosa que Otto Preminger culminó con bastante poca traza, Lubitsch realizó esta sutil y aterciopelada parodia de los añejos y apolillados convencionalismos sociales que nutrían el sistema de clases británico, basada en un relato original de Margery Sharp. La peculiar relación entre un epicúreo profesor checo exiliado en Inglaterra y una vitalista criada compulsivamente atraída por la fontanería, en los albores de la Segunda Guerra Mundial, devenía una deliciosa parábola de trazo romántico en torno al imperioso tesón por alcanzar el amor y obtener el respeto de tus semejantes, cuya engañosa frivolidad y benevolencia escondía el hálito cáustico y subversivo propio de su director y, en consecuencia, ponía un digno colofón a una irrepetible forma de hacer cine, consignada a la perspicacia y honradez del espectador. Encantadora pareja protagonista e inmejorable tratamiento de los personajes secundarios.

Otras películas sobre FONTANERIA

El plomero apasionado – Edward Sedgwick (1932)
El visitante – Peter Weir (1979)
Brazil – Terry Gilliam (1985)

TIENDA (El bazar de las sorpresas)

Tipo de establecimiento comercial en el cual la gente compra bienes o servicios a cambio del desembolso de una determinada cantidad de dinero, es decir, del valor monetario con el cual el producto o servicio ha sido asignado. (definicionabc.com)

«Una tienda de libros es una de las pocas evidencias que tenemos de que la gente todavía piensa»
Jerry Seinfeld (1954-) Comediante, actor y escritor estadounidense

EL BAZAR DE LAS SORPRESAS (The shop around the corner) – 1940

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Director Ernst Lubitsch
Guion Samson Raphaelson
Fotografía William Daniels
Música Werner R. Heymann
Producción Metro Goldwyn Mayer
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 97m. B/N
Reparto James Stewart, Margaret Sullavan, Frank Morgan, Felix Bressart, William Tracy, Joseph Schildkraut, Sara Haden, Inez Courtney.

«Olvidemos los problemas de nuestras vidas, hablemos de las cosas importantes y hermosas que hay en el mundo. No perdamos el tiempo explicándonos los vulgares detalles de cómo nos ganamos la vida. No lo hagamos»

Pocas veces el refinamiento moral y la elegancia descriptiva del llamado ‘toque’ Lubitsch aplicó los volubles resortes del corazón con tanta profundidad emotiva como en esta memorable comedia sentimental, basada en la obra teatral Parfumarie de Nikolaus Laszlo, que narraba cómo dos dependientes mal avenidos de una tienda de objetos de regalo de Budapest mantienen una romántica relación epistolar ignorando sus respectivas identidades. Esta característica situación de equívoco, objeto de una versión musical de Robert Z. Leonard, IN THE GOOD OLD SUMMERTIME (1949), y una insípida actualización de Nora Ephron, TIENES UN E-MAIL (1998), se apoyaba en un excelente guion de Samson Raphaelson, colmado de referencias culturales y deliciosos diálogos, para amoldar con sutil ironía cuestiones como el retraimiento afectivo, el temor a la sexualidad o, incluso, el desempleo. El portentoso alarde de exactitud en el encuadre y en el uso del fuera de campo, su mítica pareja protagonista y una privativa galería de actores secundarios redondeaban esta obra maestra.

Otras películas ambientadas en una TIENDA

La pequeña tienda de los horrores – Roger Corman (1960)
La tienda de la calle Mayor – J.Kadár y E.Klos (1965)
Clerks – Kevin Smith (1994)