Alain Delon

ZOZOBRA (La primera noche de la quietud)

Inquietud, aflicción y congoja del ánimo, que no deja sosegar, o por el riesgo que amenaza, o por el mal que ya se padece. (RAE)

“El despertar de la razón, después de haber gozado del amor, suele tener momentos de zozobra”
Aurora Cáceres Moreno (1877-1958) Escritora peruana

LA PRIMERA NOCHE DE LA QUIETUD (La prima notte di quiete) – 1972

Director Valerio Zurlini
Guion Valerio Zurlini y Enrico Medioli
Fotografía Dario Di Palma
Música Mario Nascimbene
Producción Mondial Televisione Film/Adel Productions/Valoria Films
Nacionalidad Italia/ Francia
Duración 119m. Color
Reparto Alain Delon, Sonia Petrova, Lea Massari, Giancarlo Giannini, Salvo Randone, Alida Valli, Renato Salvatori, Adalberto Maria Merli.
* Mario Nascimbene – Incontro d’amore

«Si volvemos a encontrarnos será sonriendo; si no entonces es que hacemos bien en despedirnos»

Un desesperanzado hombre bohemio de linaje aristocrático y acusado instinto autodestructivo, roído por un trágico pasado amoroso y por la sordidez de su posesiva relación conyugal, inicia un romance condenado al fracaso con una bella e infamada alumna del instituto de Rímini donde ejerce como profesor interino de historia del arte. Trazando el agorero itinerario emocional y psicológico del protagonista bajo una atmósfera de amarga e intensa melancolía, Valerio Zurlini sublimaba su distintiva confluencia entre nihilismo, exacerbación romántica y vacío existencial para reflexionar sobre la angustiosa zozobra de vivir y no sentirse amado, ni siquiera por uno mismo. Un largometraje nutrido de numerosas referencias culturales (incluso el título evoca un verso de Goethe) que sobresale por una puesta en escena densa, opresiva y abyecta, de apariencia espectral y esencia casi fúnebre, y gratifica al espectador con una matizada actuación de Alain Delon, abanderando un espléndido conjunto de intérpretes y dando réplica a una hermosa Sonia Petrovna, en el papel más importante de su carrera como actriz.

Otras películas determinadas por un estado de ZOZOBRA existencial

El hombre del oeste – Anthony Mann (1958)
Otra mujer – Woody Allen (1988)
Lejano – Nuri Bilge Ceylan (2002)

GABARDINA (El clan de los sicilianos)

Prenda de vestir impermeable, de manga larga, que cubre el cuerpo hasta la rodilla, va abierta por delante y se pone sobre otras prendas para protegerse de la lluvia o el viento. (google.com)

«Este borrón de sangre y de tinta china, este baño sin rimmel ni nembutal; estos huesos que vuelven de la oficina, dentro de una gabardina con manchas de soledad» (canción Cerrado por derribo)
Joaquín Sabina (1949-) Cantautor, poeta y pintor español

EL CLAN DE LOS SICILIANOS (Le clan des sicilians) – 1969

Director Henri Verneuil
Guion Henri Verneuil, José Giovanni y Pierre Pelegri
Fotografía Henri Decae
Música Ennio Morricone
Producción Les Films du Siècle/Fox Europa
Nacionalidad Francia/ Italia
Duración 115m. Color
Reparto Alain Delon, Jean Gabin, Lino Ventura, Irina Demick, Amedeo Nazzari, Philippe Baronet, Yves Lefebvre, Karen Blanguernon.

«Si a los treinta y cinco años es muy fácil hacerlo, a los sesenta y cinco es mucho más fácil evitarlo»

Favoreciéndose de la contundente sequedad dialéctica del reputado José Giovanni, y, por encima de todo, de la irremplazable confluencia protagónica de tres de los más importantes astros del polar francés, Henri Verneuil obtuvo un importante éxito comercial con esta solvente adaptación de la novela negra homónima de Auguste LeBreton. El desafío vital que un imperturbable ladrón y asesino (Delon) prorratea entre un tenaz comisario de la policía parisina (Ventura) y el patriarca de una familia mafiosa siciliana establecida en París (Gabin), a raíz del ambicioso y concienzudo robo de las joyas reunidas para una exposición internacional en Roma, fue plasmado con un lacónico distanciamiento de sustrato realista, tan incisivo en su voluntarioso designio de hondura psicológica como detallista en su complaciente envoltura visual de impronta sesentera. Una competente intriga criminal, enriquecida con una contagiosa partitura de Ennio Morricone, que, en su momento, inauguró una serie de películas consagradas a internacionalizar la tradicional versión gala del género negro.

Otras películas donde se usa la GABARDINA como vestimenta habitual

Casablanca – Michael Curtiz (1942)
Mi tío – Jacques Tati (1958)
Matrix – Andy y Larry Wachowski (1999)

CLÍMAX (Rocco y sus hermanos)

1. Punto más alto o culminación de un proceso.
2. Momento culminante de un poema o de una acción dramática.
(RAE)

“Lo que queremos es una historia que comience con un terremoto y que vaya poco a poco hacia el clímax”
Samuel Goldwyn (1879-1974) Productor de cine polaco y estadounidense

ROCCO Y SUS HERMANOS (Rocco e i suoi fratelli) – 1960

Director Luchino Visconti
Guion Suso Cecchi d’Amico, Pasquale Festa Campanile, Massimo Franciosa y Enrico Medioli
Fotografía Giuseppe Rotunno
Música Nino Rota
Producción Titanus/Les Films Marceau
Nacionalidad Italia/ Francia
Duración 170m. B/N
Reparto Alain Delon, Renato Salvatori, Annie Girardot, Katina Paxinou, Claudia Cardinale, Roger Hanin, Paolo Stoppa, Claudia Mori, Adriana Asti.

«Hemos creído que podíamos empezar juntos una nueva vida, sin pensar en el mal que hacíamos a los demás»

Grandioso y muy poco complaciente fresco histórico sobre las hendiduras del denominado ‘miracolo económico’, basado en un pasaje de la novela Il ponte della Ghisolfa de Giovanni Testori, que constituye uno de los títulos más hermosos de Visconti y representa un perfecto eslabón entre su impronta neorrealista y el decadente preciosismo operístico que singularizó su obra a partir de entonces. Magistralmente iluminada por Giuseppe Rotunno, acompasada por la impetuosa banda sonora del maestro Rota e interpretada con conmovedora expresividad por un reparto soberbio (del que sobresale una persuasiva Annie Girardot), cristaliza una angustiosa y perturbadora parábola existencialista sobre el desarraigo, la abnegación y el deseo amoroso como raíz de insania y devastación a través de la incapacidad de una familia de inmigrantes lucana para adaptarse a la hostiles imperativos de la urbe milanesa. Rotunda elegía de ambiente pugilístico, dividida en cinco capítulos según los nombres de cada uno de los hermanos, ocasionó un sonado escándalo por su obvio mensaje social y el sobrecogedor clímax dramático de su trágico desenlace.

Otras películas que sobresalen por la rotundidad de su CLÍMAX final

El puente sobre el río Kwai – David Lean (1957)
Psicosis – Alfred Hitchcock (1960)
Magnolia – Paul Thomas Anderson (1999)

USURPACIÓN (A pleno sol)

1. Apoderarse de un bien o derecho ajeno, generalmente por medios violentos.
2. Apoderarse de la dignidad, empleo u oficio de otro, y usarlos como si fueran propios.
(Espasa-Calpe)
La usurpación de identidad es la apropiación de la identidad de una persona: hacerse pasar por esa persona, asumir su identidad ante otras personas en público o en privado, en general para acceder a ciertos recursos o la obtención de créditos y otros beneficios en nombre de esa persona. (Wikipedia)

“En un mal gobierno, esta igualdad sólo es aparente e ilusoria. Sirve tan sólo para mantener al pobre en la miseria, y al rico en la usurpación. De hecho, la leyes siempre son útiles a los que poseen y perjudiciales a los que nada tienen”
Jean-Jacques Rousseau (1712-1778) Escritor, filósofo, músico, botánico y naturalista franco-helvético

A PLENO SOL (Plein soleil) – 1960

Director René Clement
Guion René Clement y Paul Gegauff
Fotografía Henri Decaë
Música Nino Rota
Producción Robert et Raymond Hakim/Paris Film/Titanus/Paritalia
Nacionalidad Francia/ Italia
Duración 112m. Color
Reparto Alain Delon, Maurice Ronet, Marie Laforêt, Erno Crisa, Frank Latimore, Ave Ninchi, Bill Kears, Viviane Chantel, Nerio Bernardi.

«A fin de cuentas, ¿de qué sirve tener dinero cuando puedes gastar el de los demás?»

Valiéndose de la emblemática novela negra The talented Mr. Ripley de Patricia Highsmith, remozada con dudoso preciosismo a cargo de Anthony Minghella en 1999, René Clement fraguó esta ejemplar intriga psicológica que perdura entre las obras más preciadas de su filmografía. Alain Delon, en su definitiva confirmación como símbolo generacional, daba vida a un seductor, taimado y despreciable buscavidas estadounidense que optaba por mejorar su situación social usurpando sin contemplaciones la identidad de su amigo y suntuoso heredero de un rico industrial californiano. A pesar de un decoroso epílogo que adulteraba con creces el texto original, el director galo consiguió fraguar con soberano talento el ambiente amoral y misterioso de este suspicaz vínculo de humillación y dominio, amparando su destreza narrativa en la primorosa música de Nino Rota y la característica luminosidad mediterránea captada en Eastmancolor por Henri Decae. Acogida en su momento con extremada frialdad, la película mantiene en la actualidad toda la fascinación que le confiere su merecida categoría de culto.

Otras películas sobre la USURPACIÓN DE IDENTIDAD

Mentira latente – Mitchell Leisen (1950)
El reportero – Michelangelo Antonioni (1975)
Atrápame si puedes – Steven Spielberg (2002)

TACITURNIDAD (El silencio de un hombre)

Estado morboso que se caracteriza por un comportamiento pasivo, silencioso y que generalmente se asocia a un estado depresivo. (diccionariomedico.net)

«El silencio no debe considerarse como la sabiduría de los necios, sino como la honra de los hombres sabios, que poseen no el defecto sino la virtud de la taciturnidad»
Thomas Browne (1605-1682) Médico y escritor inglés

EL SILENCIO DE UN HOMBRE (Le samourai) – 1967

Director Jean-Pierre Melville
Guion Jean-Pierre Melville y Georges Pellegrin
Fotografía Henri Decae
Música François de Roubaix
Producción Filme1/CICC/Fida
Nacionalidad Francia/ Italia
Duración 105m. Color
Reparto Alain Delon, François Périer, Nathalie Delon, Cathy Rosier, Jean-Pierre Posier, Jacques Leroy, Michel Boisrond, Robert Favart.

«No hay soledad más profunda que la del samurái… salvo la de un tigre en la selva… tal vez…»

Posiblemente la obra cumbre del realizador francés, y, sin ningún titubeo, una de las muestras de cine policíaco europeo más auténticas, transgresoras e influyentes de todos los tiempos. Esta implacable adaptación de la novela Ronin de Joan McLeod sobre el ritual cotidiano por la supervivencia de un asesino a sueldo taciturno e imperturbable evidencia mejor que otro título el atmosférico, minucioso y amanerado estilo de su autor, cimentado en una sublime cohesión entre su turbadora belleza visual y una alocución flemática, nihilista y filosófica hasta el agotamiento. Encauzada a modo de una tragedia griega, inauguró una especie de trilogía negra melvilliana protagonizada por un hermético Alain Delon y completada con CÍRCULO ROJO (1970) y CRÓNICA NEGRA (1972), en la que se establecieron algunas de las pautas que sustentarían la futura carrera del actor, quien, por cierto, rubricó aquí una de sus más solemnes caracterizaciones. Cabe destacar, además, la angustiante y uniforme partitura de François de Roubaix y una fotografía de tonos grises sencillamente magistral a cargo de Henri Decae.

Otras películas caracterizadas por la TACITURNIDAD de su personaje protagonista

Django – Sergio Corbucci (1966)
Whisky – J.P.Rebella y P.Stoll (2004)
El aura – Fabián Bielinsky (2005)