Suspensión colectiva de la actividad laboral por parte de los trabajadores con el fin de reivindicar mejoras en las condiciones de trabajo o manifestarse contra recortes en los derechos sociales. Según la Organización Internacional del Trabajo, es uno de los medios legítimos fundamentales de que disponen los ciudadanos y específicamente los trabajadores (a través del movimiento sindical y las organizaciones sindicales) para la promoción y defensa de sus intereses económicos y sociales. (Wikipedia)
«Las huelgas, cuandoquiera y dondequiera que surjan, merecen el respaldo de todos los compañeros de trabajo (…) Ellas muestran que la gente está empezando a conocer sus derechos y, conociéndolos, se atreven a mantenerlos»
Benjamin Tucker (1854-1939) Teórico político estadounidense
LA SAL DE LA TIERRA (Salt of the earth) – 1954
Director Herbert J. Biberman
Guion Michael Wilson
Fotografía Stanley Meredith y Leonard Stark
Música Sol Kaplan
Producción IPC
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 95m. B/N
Reparto Rosaura Revueltas, Will Geer, David Wolfe, Mervin Williams, Frank Talavera, David Sarvis, Juan Chacón, Ernesto Velázquez.
«Nuestros corazones están profundamente arraigados a este lugar, más que los pinos e incluso que la mina. En estos arroyos mi bisabuelo criaba ganado antes de que llegaran los anglosajones…»
Obra maestra por la sensibilidad y lirismo de su factura, así como por la crudeza de su propósito realista y documental, esta producción independiente persiste como uno de los escasos exponentes de cine acusador e insurrecto, de marcado carácter feminista e integracionista, cuajados en la Norteamérica de la época. Ubicada en el estado de Nuevo México en 1951, revivía con los propios obreros y sus mujeres la huelga activada por una colectividad minera de origen azteca hasta componer un rotundo manifiesto reivindicativo contra la discriminación racial y las injusticias laborales. La tersura y pureza dramática de sus imágenes sorprende aún hoy por los boicots y las amenazas que tuvo que afrontar un rodaje ya de por sí apremiado por su escasez de recursos; mientras que las secuelas que acarreó su distribución (no estrenada en Estados Unidos hasta 1966) fueron todavía más dolorosas: Raquel Revueltas fue encarcelada y posteriormente deportada a su país, mientras que tanto el guionista como el realizador (éste último no volvió a dirigir hasta 1968) fueron relegados al más hiriente ostracismo por la ‘caza de brujas’.
Otras películas determinadas por una HUELGA
La huelga – Sergei M. Eisenstein (1924)
¡Qué verde era mi valle! – John Ford (1941)
Los camaradas – Mario Monicelli (1963)