Rossano Brazzi

ESTRELLATO (La condesa descalza)

Condición o situación de la persona, en especial del artista de cine, que ha alcanzado la fama y se ha convertido en una estrella. (google.es)

«El estrellato es mejor que cualquier droga que haya probado y más intenso que el mejor sexo que haya tenido»
Noel Gallagher (1967-) Guitarrista, compositor y cantante de la banda inglesa Oasis

LA CONDESA DESCALZA (The barefoot contessa) – 1954

Director Joseph L. Mankiewicz
Guion Joseph L. Mankiewicz
Fotografía Jack Cardiff
Música Mario Nascimbene
Producción Figaro/Rizzoli-Haggiag/Transoceanic Film/United Artists
Nacionalidad Estados Unidos/ Italia
Duración 128m. Color
Reparto Humphrey Bogart, Ava Gardner, Edmond O’Brien, Rossano Brazzi, Marius Göring, Valentina Cortese, Franco Interleghi.
* Mario Nascimbene – Death of Maria

«Si ha nacido actriz, yo la ayudaré. El arte no se aprende, se nace con él»

Al igual que ya había hecho con el mundo de Broadway en EVA AL DESNUDO, Mankiewicz diseccionó su todavía más cercano universo cinematográfico en este mítico melodrama que permanece como una de las más precisas, bellas e incisivas fábulas jamás concebidas a partir del inflexible hechizo que envuelve a la prepotente y desalmada maquinaria hollywoodiense. La recomposición en tres acertados flashbacks del ascenso y caída de una bailarina flamenca de Madrid, convertida en una brillante estrella pese a que ella únicamente ambicionaba ser feliz, fundamentaba su magnetismo en un guion original pletórico de diálogos de un amargo e inspirado sarcasmo, una puesta en escena impecable (refrendada por una extraordinaria fotografía en color del maestro Jack Cardiff) y unas interpretaciones soberbias de Bogart, O’Brien y Gardner, ésta última en la cúspide de su popularidad. Filmada principalmente en Roma, con cierto alboroto y numerosos inconvenientes económicos, padeció un recibimiento crítico nada benévolo, aunque el paso del tiempo ha hecho como siempre justicia para conferirle la categoría de obra de culto.

Otras películas que ofrecen una amarga e implacable reflexión sobre el ESTRELLATO

Ha nacido una estrella – George Cukor (1954)
En la cuerda floja – James Mangold (2005)
La vida en rosa – Olivier Dahan (2007)

ANTICUARIO (Locuras de verano)

Una tienda de antigüedades o anticuario es una tienda al por menor especializada en la venta de objetos antiguos. Su producto es normalmente suministrado por subastas, ventas del estado, búsquedas en los mercadillos, compra de casas a particulares por defunción o mudanza, etc. Los objetos vendidos en un anticuario van desde muebles a pintura, objetos de decoración, bisutería, libros, etc. (Wikipedia)
Persona o establecimiento dedicados al comercio de antigüedades o a coleccionarlas. El que hace profesión del conocimiento de las cosas antiguas. (Larousse Editorial)

«¿Alguna vez has pensado empezar de cero en otra ciudad? Fue entonces cuando todo cambió. Justo al acercarme a aquel viejo cartel de madera escrito en francés que vendían en un anticuario improvisado de Madrid. Aux tissus des Vosges, Alice HUMBERT, nouveautés. Entré sin decir nada. Tenía la mirada perdida del que logra lo que quiere. En pocos segundos presentí un vuelco y una irreprimible necesidad de cambiar de vida. Traducido quería decir: tejidos de los Vosgos, Alice Humbert, novedades. Significaba más, mucho más… de la mano de dos mujeres maravillosas, irresistibles y arrebatadoras»
Màxim Huerta (1971-) Periodista y escritor español

LOCURAS DE VERANO (Summertime) – 1955

locuras

Director David Lean
Guion David Lean y H.E. Bates
Fotografía Jack Hildyard
Música Alessandro Cicognini
Producción London Films/Lopert Productions
Nacionalidad Gran Bretaña/ EEUU
Duración 100m. Color
Reparto Katharine Hepburn, Rossano Brazzi, Isa Miranda, Darren McGavin, Mari Aldon, Jane Rose, Gaetano Autiero, MacDonald Parke.

«¿Por qué hay que comprender? Las cosas más hermosas de la vida son las que no se comprenden»

Brillante adaptación de la obra teatral de Arthur Laurents The time of the cuckoo, que permite dividir el período puramente intimista de David Lean con las solemnes y fastuosas superproducciones que integrarían su posterior obra. Recuperando el tema del romance fugaz y consternador abordado en la esencial BREVE ENCUENTRO (1946), narró con semejante emotividad aunque menor dosis de inventiva el transitorio idilio que una solterona turista norteamericana vive con un galán vendedor de antigüedades durante el transcurso de sus vacaciones en Venecia. Una profunda reflexión sobre la soledad y el embrujo de la pasión otoñal, expuesta con sensibilidad dramática y sencillez descriptiva a través de una portentosa fotografía en technicolor de Jack Hildyard, que aprovechaba su tono documental (especialmente en su primera mitad) para captar el hechizo de la ciudad de laberínticos canales con una presunción pictórica absolutamente primorosa. Una vez más, Katharine Hepburn volvió a evidenciar su inmenso talento con una caracterización tan magistral que acabó minimizando la labor de su solvente «partenaire».

Otras películas con protagonismo de un ANTICUARIO

Un italiano en Londres – Alberto Sordi (1966)
La maldición del altar rojo – Vernon Shewell (1968)
El otro señor Klein – Joseph Losey (1976)