Cassen

DISPARATE (Amanece, que no es poco)

1. Dicho o hecho totalmente absurdo, equivocado o carente de lógica o sentido.
2. Cosa que excede o sobrepasa los límites de lo común o de lo ordinario.
3. Palabrota o insulto violento que se dice en un momento de ofuscación o gran enfado.
(lexico.com)

“Más veces descubrimos nuestra sabiduría con nuestros disparates que con nuestra ilustración”
Oscar Wilde (1954-1900) Escritor, poeta y dramaturgo irlandés

AMANECE, QUE NO ES POCO (Amanece, que no es poco) – 1989

Director José Luis Cuerda
Guion José Luis Cuerda
Fotografía Porfirio Enríquez
Música José Nieto
Producción CAC/TVE
Nacionalidad España
Duración 106m. Color
Reparto José Sazatornil, Cassen, Luis Ciges, Antonio Resines, Aurora Bautista, Chus Lampreave, Manuel Alexandre, Rafael Alonso, Gabino Diego.

«¡Se me está muriendo divinamente, te lo juro! De los años que llevo de médico nunca había visto a nadie morirse tan bien como se está muriendo tu padre. ¡Qué irse, qué apagarse, con qué parsimonia…! Estoy disfrutando que no te lo puedes ni imaginar»

Título de culto por antonomasia en la historia del cine español contemporáneo y obra maestra del humor absurdo/surrealista, donde el malogrado realizador albaceteño readaptaba una serie de ideas concebidas para un frustrado proyecto televisivo de trece episodios, culminando un tupido retrato coral del subdesarrollo, el aislacionismo y la represión sostenida por el régimen franquista. Ambientada en un prototípico pueblo ibérico de finales de los cincuenta, planteaba sin apenas línea argumental una especie de realismo mágico de porte costumbrista para pespuntear una hilera de disparatados gags de raíz verbal (clases escolares impartidas cantando góspel, misas en latín vitoreadas cual espectáculo taurino, hombres brotando de un bancal como hortalizas, etc.) que ridiculizaban múltiples tópicos nacionales (la relevancia de la fuerzas vivas, el alcoholismo, la xenofobia, el adulterio, etc.) de la mano de un inabarcable grupo de personajes variopintos, interpretados por un reparto de lujo. Su inesperado éxito propició una especie de secuela espiritual, ASÍ EN EL CIELO COMO EN LA TIERRA (1995) y otra reciente de ámbito postapocalíptico, TIEMPO DESPUÉS (2018).

Otras películas que rinden culto al DISPARATE

Sopa de ganso – Leo McCarey (1933)
La vida de Brian – Terry Jones (1979)
Aterriza como puedas – Jim Abrahams, Jerry Zucker y David Zucker (1980)

SUCURSAL (Atraco a las tres)

Se refiere a cada uno de los establecimientos u oficinas que una empresa tiene en distintos sitios, y que dependen de una central. (Larousse Editorial)
La sucursal bancaria es la dependencia que establece una entidad bancaria en un determinado lugar, la cual goza de ciertas atribuciones y autonomía con respecto a los servicios centrales. Es el principal canal de distribución de sus productos para muchas de las entidades de crédito. (diccionarioempresarial.wolterskluwer.es)

«Por querer alcanzar la cima, uno se hace financiero; la mujer se queda en casa, uno a buscar dinero. Por andar por las nubes, uno se olvida del suelo, y de saber que tu propia casa, es la sucursal del cielo»
Ricardo Arjona (1964-) Compositor, arreglista, músico y productor musical guatemalteco

ATRACO A LAS TRES (Atraco a las tres) – 1962

Director José María Forqué
Guion Pedro Marsó, Vicente Coello y Rafael J. Salvia
Fotografía Alejandro Ulloa
Música Adolfo Waitzman
Producción Hesperia Films/Pedro Masó P.C.
Nacionalidad España
Duración 88m. B/N
Reparto José Luis López Vázquez, Cassen, Gracita Morales, Manuel Alexandre, Katia Loritz, José Orjas, Agustín González, Alfredo Landa, Rafaela Aparicio, Lola Gaos.

«El dinero lo repartiremos más adelante, cuando se haya olvidado todo (…) Hay que ser prudentes, nadie debe saber que somos ricos. El dinero lo guardaré yo en sitio seguro (…) Pero, ¿qué quieres, que nos metan a todos en la cárcel? La prisa es lo que pierde a los ambiciosos»

La breve colaboración entre el versatil realizador José María Forqué y el no menos prolífico guionista/productor Pedro Masó deparó una de las cúspides de la comedia clásica española, cuya «rufufiana» premisa consistía en pormenorizar el chapucero, disparatado e inverosímil plan urdido por los empleados de una sucursal bancaria para huir de una vez por todas de la precaria situación económica que determinaba sus vidas. Las características manías y obsesiones del ciudadano medio español, junto a sus carencias formativas o su inmanente complejo de inferioridad, eran parodiadas con acritud, patetismo y cierta benevolencia en este deleitable sainete costumbrista que supo sortear la férrea censura de la época con desenvoltura y algo de candidez, fundamentalmente ostensible en un desenlace harto complaciente. Formidable banda sonora de Adolfo Waitzman y excelso reparto coral, que incluye la presentación cinematográfica de Alfredo Landa, para una película que progresa con vigoroso compás descriptivo, sin apenas fisuras en el desarrollo del relato.

Otras películas donde se perpetra el atraco a una SUCURSAL BANCARIA

La casa número 322 – Richard Quine (1954)
Crónica negra – Jean-Pierre Melville (1972)
La caja 507 – Enrique Urbizu (2002)