Maniobra, trampa o truco que se le hace a alguien a propósito para que se sienta ridiculizado, engañado o victimizado, normalmente por humor. (Wikipedia)
Una broma pesada es aquella que puede generar un daño físico o psicológico a la persona o personas que la reciben.
“Existe algunos momentos y ocasiones extrañas en este complejo y difícil asunto que llamamos vida, en que el hombre toma el universo entero por una broma pesada, aunque no pueda ver en ella gracia alguna y esté totalmente persuadido de que la broma corre a expensas suya” (novela Moby Dick)
Herman Melville (1819-1891) Escritor estadounidense
HABITACIÓN PARA CUATRO (Amici mei) – 1975

Director Mario Monicelli
Guion Tullio Pinelli, Pietro Germi, Piero de Bernardi, Leonardo Benevenuti
Fotografía Luigi Kuveiller
Música Carlo Rustichelli
Producción Rizzoli Film/R.P.A. Cinematografica
Nacionalidad Italia
Duración 109m. Color
Reparto Ugo Tognazzi, Philippe Noiret, Gastone Moschin, Adolfo Celi, Duilio Del Prete, Renzo Montagnani, Bernard Blier.
«Henos aquí. Cuatro idiotas, pero con esa amistad que dura tanto tiempo, aún después de la muerte y a pesar de todas las diferencias que hay entre nosotros (…) Todos unidos por ciertas reglas que nunca nos decimos: el derecho de molestarnos recíprocamente, las ganas de reír, de divertirse, y el gusto difícil de no tomarse nunca nada en serio.»
El súbito fallecimiento de Pietro Germi a causa de complicaciones relacionadas con una hepatitis aguda, poco antes del inicio del rodaje, permitió a Mario Monicelli realizar esta cínica e insolente comedia costumbrista de voluntad testamentaria, surtida de ‘sketches’ hilarantes, deslavazados y colmados de referencias sexuales tan explícitas como extemporáneamente inapropiadas. Suscitando un extraño sentimiento entre empatía, sonrojo e indignación, la película narraba las correrías de un grupo de inseparables cincuentones florentinos, sin vergüenza ni escrúpulos, habituados a perpetrar bromas (en su mayoría, pesadas) para justificar su perpetua inmadurez, soslayar su aburrimiento vital y, en definitiva, desoír su profundo temor a envejecer. Este fresco, divertido y melancólico canto a la amistad, representado por un efectivo equipo de intérpretes (en el que quizás sobresale el gran Ugo Tognazzi), conocería dos inevitables secuelas: la dignísima UN QUINTETO A LO LOCO (1982) y la innecesaria AMICI MIEI ATTO III (1985), dirigidas por el propio Monicelli y Nanni Loy, respectivamente.
Otras películas que contienen alguna BROMA pesada
Calle Mayor – Juan Antonio Bardem (1956)
Carrie – Brian De Palma (1976)
Matilda – Danny DeVito (1996)