ADICCIÓN (Réquiem por un sueño)

Enfermedad física y psicoemocional, según la Organización Mundial de la Salud. En el sentido tradicional es una dependencia o necesidad hacia una sustancia, actividad o relación causada por la satisfacción que ésta causa a la persona. Está conformada por los deseos que consumen los pensamientos y comportamientos (síndrome de abstinencia) del adicto, y éstos actúan en aquellas actividades diseñadas para conseguir la sensación o efecto deseado y/o para comprometerse en la actividad deseada (comportamientos adictivos). (Wikipedia)

«La adicción nunca debería ser tratada como un delito. Debe ser abordada como un problema de salud»
Ralph Nader (1934-) Activista y abogado estadounidense

REQUIEM POR UN SUEÑO (Requiem for a dream) – 2000

2000. Requiem por un sueño

Director Darren Aronofsky
Guion Darren Aronofsky y Hubert Selby Jr.
Fotografía Matthew Libatique
Música Clint Mansell
Producción Artisan Enterteinment/Thousand Words
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 102m. Color
Reparto Ellen Burstyn, Jared Leto, Jennifer Connelly, Marlon Wayans, Louise Lasser, Keith David, Christopher McDonald, Michael Kaycheck.

«Es un motivo para levantarme por la mañana, un motivo para perder peso, para ponerme el vestido rojo… y es un motivo para sonreír. Convierte el mañana en algo positivo. ¿Qué tengo yo Harry? ¿Por qué debo seguir haciendo la cama y lavando los platos? Lo hago, ¿pero por qué debo seguir haciéndolo?»

Revelado a nivel internacional gracias a un ingenioso y revolucionario thriller pseudo-fantástico, PI, FE EN EL CAOS (1998), su ópera prima, Darren Aronofsky porfió en la demostración de su talento como cineasta al incomodar nuestra conciencia con esta arriesgada y tremendista adaptación de la novela que Hubert Selby Jr. trazó sobre los diferentes tipos de adicciones que vulneran sin piedad el bienestar de la sociedad de consumo. Así pues, reemplazando las calles del Bronx del relato original por el Coney Island de su infancia, el joven realizador describía de forma paralela la paulatina rendición psíquica y fisiológica de tres jóvenes vinculados al tráfico de estupefacientes y la viuda ama de casa y madre de uno de ellos (pasmosa composición de Ellen Burstyn), entregada sin mesura al consumo de bazofia televisiva y anfetaminas para adelgazar. Filmada con un estilo cínico y deliberadamente desaseado, perfeccionaba su sobrecogedora crudeza con modernas técnicas digitales, especialmente visibles en la dilatación de las pupilas tras el efecto de la heroína, y un convulsivo montaje musical.

Otras películas sobre ADICCIONES

Días sin huella – Billy Wilder (1945)
Días de vino y rosas – Blake Edwards (1962)
Trainspotting – Danny Boyle (1996)