SENSIBLERÍA (Love actually)

Cualidad de sensiblero, es decir, que implica o muestra un sentimentalismo exagerado, superficial o fingido. (RAE)

«Sin ternura, el amor es puro afán de dominio y de autoafirmación hasta lo destructivo. La ternura sin amor es sensiblería blanda incapaz de crear nada»
Fernando Savater (1947-) Filósofo y escritor español

LOVE ACTUALLY (Love actually) – 2003

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Director Richard Curtis
Guion Richard Curtis
Fotografía Michael Coulter
Música Craig Armstrong
Producción Universal/Working Title Films/DNA Films
Nacionalidad Reino Unido/ Estados Unidos
Duración 128m. Color
Reparto Hugh Grant, Liam Neeson, Colin Firth, Keira Knightley, Laura Linney, Emma Thompson, Alan Rickman, Billy Nighy, Rowan Atkinson.

«Dicen que vivimos en un mundo de odio y egoísmo, pero yo no lo veo así. Me parece que el amor está en todas partes. A menudo, no es especialmente digno ni noticiable, pero siempre está ahí: padres e hijos, madres e hijas, maridos y esposas, novios, novias, viejos amigos…»

Responsable en su faceta como guionista de dos de los mayores éxitos de la comedia romántica anglosajona de los noventa, CUATRO BODAS Y UN FUNERAL y NOTTING HILL (1999), Richard Curtis formalizó su salto a la dirección con este edulcorado filme de historias cruzadas, que, con el paso de los años, ha logrado consolidarse como el gran clásico navideño del siglo XXI. Apostando por la superficialidad, la sensiblería y un humor de rancio estereotipo sexista en detrimento de la verosimilitud, la sofisticación y el rigor descriptivo, celebraba la poliédrica ubicuidad del amor entrelazando diez dilemas afectivos de fácil impacto emocional, entre ellos, el flechazo entre el nuevo primer ministro británico y su secretaria, la tierna conexión entre un viudo y su enamoradizo hijastro o el súbito romance entre un escritor inglés de corazón roto y su asistenta portuguesa. La deliciosa partitura para piano de Craig Armstrong y su lujoso reparto embellecen este variopinto mosaico de emociones, algunas ya tan icónicas como la enternecedora declaración de amor por medio de carteles o el hilarante baile por las estancias de la residencia oficial de Downing Street.

Otras películas que caen en la SENSIBLERÍA

Los paraguas de Cherburgo – Jacques Demy (1964)
Cinema Paradiso – Giuseppe Tornatore (1988)
Philomena – Stephen Frears (2013)

Con este clásico navideño os deseo unas Felices Fiestas. Espero seguir disfrutando de vuestra compañía cinéfila a lo largo del 2025.

11 comentarios

  1. En la actual filosofía del “todo vale” (en cine y otros terrenos), aplicada en este caso a la consecución de unos determinados resultados en pantalla, los responsables de este collage que mezcla tonos y géneros sin conseguir el equilibrio, no dudaron en sacrificar la coherencia y el rigor narrativo si con ello alcanzaban efectos inmediatos sin la necesidad de profundizar en nada. Al final la cinta deja un cierto toque de frustración en el espectador que reflexione un poco y se aperciba de que es gato lo que le han vendido como liebre. El producto se salva por alguna situación divertida y unos, en ocasiones, agudos diálogos.

    ¡Feliz cambio de año!

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