Ornamento de la cabeza considerado en todas las épocas como distintivo de la autoridad real o nobiliaria, y en algunas de sus formas, como premio o condecoración debida a méritos muy singulares.
La Corona de hierro es una antigua y preciosa corona usada desde la Alta Edad Media hasta el siglo XIX para la coronación del rey de Italia. Durante mucho tiempo, los emperadores del Sacro Imperio Romano Germánico recibieron esta coronación debido a que la titulación de reyes de Italia estaba ligada a la dignidad imperial. (Wikipedia)
«Nada sienta tan bien en la frente del vencedor como una corona de modestia»
Juan Donoso Cortés (1809-1853) Filósofo, político y diplomático español
LA CORONA DE HIERRO (La corona di ferro) – 1941
Director Alessandro Blasetti
Guion Alessandro Blasetti, Renato Castellani, Corrado Pavolini, Giuseppe Zucca, Guglielmo Zorzi y Mario Chiari
Fotografía Mario Craveri y Vaclav Vich
Música Alessandro Cicognini
Producción ENIC/Lux Film
Nacionalidad Italia
Duración 97m. B/N
Reparto Massimo Girotti, Gino Cervi, Elisa Cegani, Paolo Stoppa, Luisa Ferida, Rina Morelli, Umberto Silvestri, Osvaldo Valenti, Primo Carnera.
«Es la más poderosa reliquia de la verdadera fe, majestad. Por dónde pasa la justicia triunfa, si encuentra el mal para y, cuando reemprende el camino, el bien ha vuelto a resplandecer como un milagro»
Asombroso fresco medieval de aventuras mitológicas que constituye el más aparatoso, divulgado e insólito exponente del cine rodado en Cinecittá bajo los auspicios del régimen fascista italiano, así como el título más recordado (que no el mejor) del prolífico e infravalorado Alessandro Blasetti. En una amalgama de influencias y evocaciones tan desmesurada como rocambolesca, que iba desde las prosopopéyicas leyendas teutonas hasta las tragedias familiares shakespearianas, la película urdía una caótica y moralizante fabula pseudohistórica de corte fantástico en torno a una corona que confería a su portador la facultad de obrar milagros. Exenta de cualquier impulso intelectualista y sustentada por un espléndido reparto (que incluía al excampeón mundial pugilístico Primo Carnera y en el que diversos actores encarnaban a dos personajes distintos) se caracterizaba por su atropellada narración, una atmósfera caliginosa, sensual y fantasmagórica, y, sobre todo, por su abrumadora grandilocuencia plástica, de donde sobresalían los fastuosos decorados de Virgilio Marchi.
Otras películas determinadas por la presencia de una CORONA
Las perlas de la corona – Sacha Guitry (1937)
Ricardo III – Laurence Olivier (1955)
La locura del rey Jorge – Nicholas Hytner (1994)