Martin Zandvliet

MINA (Land of mine [Bajo la arena])

Artefacto armamentístico preparado para hacer explosión al ser rozado, que se coloca estratégicamente enterrado en un lugar o sumergido en el agua. (lexico.com)
Las minas antipersona son un tipo de mina terrestre. Están diseñadas para matar o incapacitar a sus víctimas. Se utilizan para colapsar los servicios médicos enemigos, desmoralizar a sus tropas, y dañar vehículos no blindados. Por ello, se busca sobre todo que hieran gravemente o mutilen, y no tanto que maten, ya que las consecuencias de un herido en la guerra son más problemáticas que las de un muerto. Así, sus efectos más comunes son amputaciones, mutilaciones genitales, lesiones musculares y en órganos internos, o quemaduras. Se calcula que hay más de 110 millones de minas repartidas en más de 64 países (la mayoría en África). Cada año más de veintiséis mil personas mueren o sufren traumáticas mutilaciones debido a las explosiones de estas armas. Pueden permanecer activas durante más de cincuenta años después del fin de un conflicto. (Wikipedia)

«Son caminos de caminos, donde las piedras son las minas que van rompiendo huesos de la tierra que se queja, dejando invalida la esperanza» (canción Minas piedras)
Juanes (1972-) Cantante, compositor y músico colombiano

LAND OF MINE [BAJO LA ARENA] (Under sandet) – 2015

land

Director Martin Zandvliet
Guion Martin Zandvliet
Fotografía Camilla Hjelm
Música Sune Martin
Producción Amusement Park Films/Nordisk Film
Nacionalidad Dinamarca/ Alemania
Duración 100m. Color
Reparto Roland Møller, Louis Hofmann, Mikkel Boe Følsgaard, Laura Bro, Joel Basman, Oskar Bökelmann, Emil Buschow, Oskar Buschow.

«Nadie quiere ver alemanes aquí. Por lo que a nosotros respecta, solo sirven para retirar las minas alemanas de la costa occidental danesa. Minas que trajeron ustedes»

En su tercer largometraje, Martin Zandvliet decidió rescatar del olvido un conflicto post-bélico tan ignominioso como fue el resentido maltrato físico y psicológico infligido a los prisioneros de guerra alemanes (se calcula que murieron alrededor de seiscientos mil militares) por la desbocada cólera de los países que habían sido humillados por el poderoso Tercer Reich. El episodio preciso que ilustraba la película dentro de aquel deplorable contexto histórico no era otro que la abusiva e inmisericorde explotación de jóvenes soldados germanos, forzados a desactivar, sin apenas medios ni preparación, las miles de minas antipersona sembradas en la costa occidental danesa por el ejército nazi en previsión de una posible invasión aliada. Un encomiable ejemplar de cine antibelicista, tan sobrio como conmovedor, que rehuía de actitudes sesgadas o maniqueístas con voluntarioso aliento humanista, notable factura visual y un preciso e impactante sentido de la tensión, reforzado por unos sorpresivos giros argumentales. Mención especial para la verosimilitud e intensidad de sus interpretaciones.

Otras películas sembradas de MINAS ANTIPERSONA

Las tortugas también vuelan – Bahman Ghobadi (2004)
En tierra hostil – Kathryn Bigelow (2008)
Kajaki – Paul Katis (2014)