MERCADO (El hombre que sabía demasiado)

Lugar público con tiendas o puestos de venta donde se comercia, en especial con alimentos y otros productos de primera necesidad. (google.es)

«Yo no quiero un amor civilizado, con recibos y escena del sofá; yo no quiero que viajes al pasado y vuelvas del mercado con ganas de llorar» (canción Contigo)
Joaquín Sabina (1949-) Cantautor, poeta y pintor español

EL HOMBRE QUE SABÍA DEMASIADO (The man who knew too much) – 1956

marrakech2

Director Alfred Hitchcock
Guion John Michael Hayes y Angus McPhail
Fotografía Robert Burks
Música Bernard Herrmann
Producción Paramount/Filwite Productions
Nacionalidad Estados Unidos
Duración 115m. Color
Reparto James Stewart, Doris Day, Brenda De Banzie, Bernard Miles, Carolyn Jones, Daniel Gélin, Mogens Wieth, Ralph Truman, Alan Mowbray.

«Hemos venido a un sitio como Marrakech para poder hablar con libertad. Quiero decirte algo que nadie pueda oír. Éste es el sitio perfecto. ¿Cuándo vamos a tener otro hijo?»

El único título perteneciente a su etapa británica que Hitchcock quiso renovar lo hallamos en esta envolvente intriga itinerante en torno al peliagudo caso de espionaje en el que se ve envuelto un pacífico ciudadano norteamericano a raíz del angustioso secuestro de su hijo durante una visita al mercado de Marrakech. La contraposición entre un juego de apariencias insubstanciales y una atmósfera enrarecidamente perturbadora constituía el incentivo vital de otra perfecta alianza entre la sutil socarronería y un suspense gradualmente intensificado, que culminaba en la insuperable secuencia del Royal Albert Hall, donde música e imágenes eran acompasadas a la perfección tanto formal como argumentalmente. Esta elegante aunque debatible producción, que incluye la popular canción de Jay Livingston y Ray Evans Qué será será, interpretada por Doris Day, resultaría severamente perjudicada por la crítica de la época pero, vista hoy en día, resulta sobradamente superior al ya de por sí impoluto original de 1934, cimentado en un argumento de Charles Bennett y D.B. Wyndham-Lewis y protagonizado por el gran Peter Lorre.

Otras películas que contienen alguna escena en un emblemático MERCADO

Ladrón de bicicletas – Vittorio De Sica (1948) – Porta Portese (Roma)
Zazie en el metro – Louis Malle (1959)- Marché aux Puces (París)
Desde Rusia con amor – Terence Young (1963) – Gran Bazar (Estambul)

Con este clásico hitchcockiano, DICCINEARIO llega a las 1000 entradas ininterrumpidas que me autoimpuse cuando inicié mi aventura bloguera, hace ahora algo más de dos años y medio. Aunque reconozco que ya me había acostumbrado a tan ardua pero reconfortante rutina diaria, no es menos cierto que ésta deviene cada vez más difícil de compaginar con mis compromisos y obligaciones, tanto familiares como profesionales, por lo que a partir de hoy la frecuencia de entradas se reducirá a tres o cuatro semanales. Me gustaría expresar un cordial y efusivo agradecimiento a todos los que han enriquecido las publicaciones del blog con sus comentarios, o a aquellos que simplemente han hecho un pequeño hueco en su preciado tiempo para entrar a ver qué película (o palabra) era la protagonista del día.
Un fuerte abrazo a todos.

25 comentarios

  1. Enhorabuena, Antonio por tu entrada 1000. Se entiende que este ritmo sea excesivo sobre todo para el formato de tu blog, tan personal, completo y bien documentado. Muchas de esas entradas me han servido para descubrir películas maravillosas, otras para recordarlas, otras para revisionarlas… Se agradece que nos digas que continuarás y aquí estaremos para seguirte con el CINE MARAVILLOSO que nos traes. Un abrazo.

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    1. Muchas gracias! No sabes lo mucho que me satisface saber que mis entradas sirven para que algunos de los lectores del blog descubran o redescubran algunas de las películas que más han influido en fomentar mi pasión por el cine. Tienes la sensación de que el objetivo está ya parcialmente cumplido. Por supuesto que continuaré viviendo esta experiencia y será un placer que me acompañes en ella como seguidora. Un abrazo.

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  3. Hola, Antonio:
    Sugerente y significativo título para una entrada tan especial como la de hoy. Con tus publicaciones diarias en Diccineario sigues logrando enriquecer nuestra cultura cinematográfica, nos descubres obras desconocidas y también nos invitas a revisar títulos que hacía tiempo no veíamos. Es un placer leer cada día tus interesantes publicaciones. Por todo ello, GRACIAS.

    ¡ENHORABUENA por tu magnífica y perseverante labor!

    Un abrazo
    Silveria

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  5. En primer lugar, felicitarte por el mantenimiento de tan recomendable blog y por tu constancia y regularidad en su «alimentación». Todos te lo agradecemos. Así pues, adelante con otras mil.
    En cuanto al título que has elegido para la ocasión, me parece muy bien ya que se trata, a mi juicio, de una de las grandes obras de Alfred Hitchcock. Como sabemos, se trata del remake ampliado y corregido sobre la versión que el mismo Hitchcock rodara en 1934. Las insuficiencias y esquematismos de aquella son aquí virtuosamente superados con una historia más interesante y mejor construida y unos personajes notablemente enriquecidos con respecto a sus predecesores. El autor de “LA VENTANA INDISCRETA”, una vez más demostró su incuestionable talento y sabiduría técnica en una película que apenas deja resquicio para el reproche y que, por el contrario, en su redondez contiene secuencias memorables como la del Albert Hall, en la que a través del montaje se juega magistralmente con el tiempo, dilatándolo hasta conseguir transmitir plenamente al espectador la angustia y el suspense que viven los personajes.
    Un saludo.

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    1. Muchas gracias por tus ánimos y por la deferencia que tienes con el blog al embellecer muchas de las entradas con tus precisas reseñas críticas. Todo un lujo que espero seguir disfrutando en las próximas mil entradas… La verdad es que no sé si llegaré, Teo, pero te aseguro que lo intentaré… Un abrazo.

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  6. Es original la idea de relacionar El hombre que sabía demasiado con Marrakech, en lugar de hacerlo con el Royal Albert Hall (la fama de esa escena parece haber devorado al resto de la película).
    Y enhorabuena por el trabajo! Mil entradas!!!!

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  7. ¡¡¡Enhorabuena por tu palabra número mil!!! ¡¡¡A por otras mil!!! Ya nos has vuelto adictos y tu dedicación diaria ha sido, como diría un hombre tranquilo, homéeericaaaa. Pero ahora con esas tres palabras a la semana…, con esa dosificación…, nos vas a hacer desear con fervor que llegue el día de la semana que publiques…

    Beso
    Hildy

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    1. Con tu compañía a lo largo de todos estos meses, esa dedicación diaria a la que aludes ha sido mucho más fácil y reconfortante. Tus mensajes, colmados de un incomparable entusiasmo por el cine, y esas películas que asocias a la reseña con tu habitual precisión y originalidad han enriquecido día a día la configuración del blog. Muchas gracias por todo. Ha sido un placer conocerte, Hildy. Beso y un abrazo.

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    1. Me hace especial ilusión este mensaje, Anna. Leer esas afectuosas palabras supone para mí un doble motivo de orgullo; por un lado, el hecho de ser valorado por una persona de una trayectoria literaria tan importante como reconocida, y, por otro, constatar que aquel consejo que reiteradamente me dabas (sacar a relucir mis numerosas reseñas de cine en un blog) ha valido la pena. Muchas gracias por tus ánimos, por tu confianza en mí y, en definitiva, por tu amistad. Besos y un abrazo.

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  9. Aún me pregunto cómo lo has logrado, Antonio ¡Mil entradas seguidas, mil películas a cual más buena y sin descansar un sólo día! Además, manteniendo la calidad en todo momento, es una heroicidad. Entiendo perfectamente que quieras espaciar las entradas, eso sí no nos abandones ahora … Un fuerte abrazo.

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    1. No abandonaré el blog, Raúl. La experiencia ha sido (y está siendo) muy estimulante y satisfactoria. Además, entre otras cosas muchas cosas, me ha permitido conocer a gente tan interesante y con gustos tan afines a los míos como tú. Muchas gracias por tu incondicional seguimiento y por hacerme pasar tan buenos ratos leyendo y haciéndome viajar al pasado con tus amenas y pedagógicas reseñas musicales. Un fuerte abrazo.

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  10. 1000 es una cifra descomunal, teniendo el cuenta el trabajo que requiere; en consecuencia el bajar un poco el ritmo yo diría que es clínicamente recomendable. Al ritmo anterior ibas a quedarte sin películas y tampoco es eso. ¡¡¡ Enhorabuena !!!

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    1. Ojalá llegara el día que me vaya quedando sin grandes películas a las que echar mano, Jesús, pero creo que hasta ese instante todavía falta mucho… Me alegro mucho que hayáis entendido tan bien mi decisión, la cual creo que será buena tanto para la salud de un servidor como para favorecer y consolidar la supuesta calidad del blog. Un abrazo.

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  12. Felicidades por la entrada 1.000 que ya pasó 🙂 Esta versión está mucho más trabajada, es más sofisticada, los actores maravillosos, y sin embargo la primera versión para mí es la mejor, a pesar de las carencias. Era ese tiempo tan británico de Hitchcock, y El Hombre que sabía demasiado es mi película favorita de A. H. En sí lo que me gusta es la forma en que fue filmada, los actores, la forma en que está ambientada. Los detalles. Feliz fin de semana.

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